PATOLOGÍA EN CUBIERTAS DE ZINC

Podríamos denominar la PATOLOGÍA, en este caso, como ciencia que se propone estudiar los procesos morbosos de la chapa de zinc una vez instalada en una cubierta.

Debe considerarse así, la patología, como ciencia por tener sujetos  y métodos propios de investigación que la caracterizan.
Aplicando así la patología, la podemos entender como una ciencia autónoma en la que objeto consiste en el estudio del comportamiento del zinc por influencias internas o externas, físicas o químicas.

Los métodos patológicos  que en nuestros estudios mantenemos son la observación, la experimentación  y el raciocinio. la observación que es el resultado de aplicar atentamente los sentidos a los fenómenos que se desarrollan en el metal. la observación directa y seguida del material una vez instalado, pone de manifiesto la manera de producirse los fenómenos, como se desarrollan y modo de atajarlos, si cabe.
El raciocinio   es la filosofía de la observación y experimentación. los hechos recogidos y la anotación de los experimentos, de poco nos servirían si el raciocinio no formula un criterio apropiado para cada caso morboso.
la repetición de casos o sus analogías nos permiten erigir veraces doctrinas, teorías e hipótesis que vamos dando a conocer.

MUCHOS FENÓMENOS PODRÍAN SER EVITABLES.

Ese zinc que se vendió, se vende  como eterno, como inmejorable para las cubiertas. Precisamente  una  de las alteraciones  que mayormente  está acusando  son  corrosiones. Cubiertas con muy pocos años dejan ver  este fenómeno que termina llevándolas a la ruina total. Lo más sorprendente es que quienes tanto han promocionado la chapa de zinc “escondan la cabeza bajo el ala” y  no se pronuncien acorde con la realidad, con la realidad de lo que está sucediendo. Que nosotros sepamos,  no se están dando razonamientos concretos a cerca del comportamiento negativo, ruinoso de la hoja de zinc que , en muchísimos casos se está viendo a lo largo de nuestra geografía.

Los datos de cubiertas ruinosas que barajamos son tan suficientemente alarmantes que bien merece destinar tiempo a un estudio en profundidad a fin de dar con los fenómenos morbosos que alteran el metal,  y no seguir cayendo en el error de prescribir cubiertas con sistemas que sabemos que no funcionan.

Es incomprensible ver como la demanda de la hoja de zinc  más que mantenerse  crece y se siguen utilizando los mismos sistemas de instalación que están conduciendo a la ruina a las ya realizadas. 

Imagen de chapa de zinc inservible a consecuencia de la corrosión (cubierta con pocos años de vida )

El ZINC, se viene utilizando a lo largo de la historia como elemento principal en cubiertas, antaño su presencia era mucho mayor en edificaciones representativas las que incluso se terminaban  coronando  con ricas  ornamentaciones de este material. En muchas de esas edificaciones aún se puede contemplar el zinc con el desgaste lógico del paso del tiempo, que además le aporta esa característica de color tan singular.

Lamentablemente tenemos que destacar en la actualidad lo evidente y es que con muy pocos años de vida, en ocasiones por debajo de los 5 , el zinc se agota  acusando  patologías que no se dan así en las cubiertas más antiguas.
Bien es cierto que hasta hace unos cuantos años, en nuestro país el empleo de la hoja de zinc en cubiertas era muy pequeño, se utilizaba en mayoría como complemento en otro tipo de cubiertas para resolver encuentros, para recogidas de agua, ornamentos etc, . Todo cambió y su utilización pronto  empezó a ocupar los primeros puestos, pasando muy por encima de los materiales tradicionales por nosotros empleados, pizarra, teja por ejemplo.

Es lógico pensar que nadie en aquellas épocas auguraba un  futuro ruinógeno, presente que estamos viviendo, ¿ o quizás sí ?. Sí o no, la realidad no deja lugar a dudas, son muchas,  demasiadas las cubiertas dispersas por toda nuestra geografía, por todo el mundo,  que traen de cabeza a sus propietarios o responsables, que empiezan dando escasa importancia a una pequeña humedad, pasando de reparar una pequeña gotera a finalmente   sentir verdadera impotencia. Aquellos que les vendieron majestuosidades o no aparecen o se terminan culpando unos a otros o culpando a la atmósfera que lo puede todo. No nos circunscribimos  a construcciones ni a zonas  concretas, los fenómenos adversos se pueden dar en todo tipo de construcciones publicas o privadas, grandes y pequeñas, en el centro, en la montaña o en la costa, en la ciudad o en el rural, es decir, todas pueden ser   susceptibles de sufrir esos daños, la realidad así lo demuestra.

Sería de gran utilidad  que los  que,   alardeando de que llevan años en el sector se consideran expertos dando consejos por doquier, estudiasen  o simplemente leyesen  y se ilustrasen para terminar  reflexionando   sobre esto del funcionamiento de las cubiertas de zinc.

Muchas cubiertas se arruinan hasta el punto de deshacerse totalmente la chapa  y los autollamados “expertos” las conocen ¿cómo es posible que no sepan dar un diagnóstico razonando a lo que sucede con aquello que han aconsejado con tanta firmeza ? como son los soportes de tableros , las láminas “de ventilación” los adyacentes fabricados a propósito para las ventilaciones tales como  lagrimeros, beatas, cumbreras, laterales  etc etc. Todos estos adyacentes, complementos o como se les quiera llamar, a juicio de este autor son una pantomima, sirven más que nada para engrosar el presupuesto y obtener pingües beneficios económicos. O de lo contrario, ¿porque realizadas las cubiertas con tanto adorno y siguiendo ciertas directrices se corroen? Lo peor de todo es que nadie sabe o no quiere decir cual es la causa que por otra parte es evidente.

Si la chapa se corroe partiendo de la cara oculta es muy sencillo deducir que algo la está atacando, pues hasta ahora, que sepamos, el zinc tiene que ser ayudado por algún otro elemento para que despierte el fenómeno de la corrosión, esos elementos se utilizaron  en la instalación y se vendieron con todas las garantías, es más, sin ellos, a priori, no se garantizaría la durabilidad de la chapa. Claro, reconocer que los adyacentes son los que conducen a la destrucción significa apechugar con la culpa teniendo que asumir la recogida de lo que recomendablemente se hizo. Al final nadie se aclara, en la mayoría de los casos se termina dirimiendo en foros judiciales.  

Convendría que los  fabricantes o sus filiales dedicasen tiempo al estudio de campo,  para así ver y llegar a conclusiones firmes   de porqué se producen de forma tan masiva ciertas alteraciones   y prescribiesen únicamente las conocidas  soluciones efectivas, a menos para que nuevas cubiertas que se realicen se hagan con sistemas que estén estén experimentados,  lejanos de la duda.  

Una de las patologías que más se repiten son las corrosiones electrolíticas, en menos medida las roturas por tensión. En cualesquiera de los casos ,  corregir estos fenómenos es sino imposible muy difícil.

Rotura por tensión
Rotura por tensión. Se volvió a reproducir después de repararse con estaño.

Sabido es que las corrosiones electrolíticas se producen dada la formación de un pila entre el zinc y elementos generalmente interiores masivos como pueden ser los tableros, también nos hemos encontrado este mismo fenómeno en ausencia de tableros instalado el zinc directamente sobre una lámina. (de este fenómeno hablamos en otro articulo). Se puede llegar a atajar el problema cuando la corrosión se presenta puntual y se llega a tiempo, aunque son mínimos los casos.

Por otra parte, las roturas por tensión se producen a consecuencia de dilataciones y contracciones de la chapa de zinc, cuando sucede este fenómeno suele ser  a consecuencia de obstáculos que no permiten los libres movimientos, generalmente son defectos de instalación. las roturas se producen mayormente en las juntas alzadas cuando están realizadas a doble pliegue y  las chapas son curvas o de longitudes considerables, vemos un ejemplo de rotura por tensión en la imagen anterior, en la misma imagen se puede ver como se intentó reparar la rotura con estaño sin embargo de nuevo se volvió a romper. La reparación se hizo con absoluto desconocimiento del fenómeno, limitándose a cubrir la grieta con estaño  para evitar la entrada de agua. Puede ocurrir que las roturas se lleguen a producirse incluso en las fijaciones y no las veamos, no deja de ser este fenómeno menos grave, pues se queda la chapa libre ofreciendo mínima resistencia al viento.

Rotura por tensión en la grapa de fijación (grapa fija)

 

Asociaciones de techadores repartidas por el resto de Europa, no son ajenas a los  problemas que se están dando en las cubiertas, principalmente de zinc, cobre y plomo.  (  https://www.nfrc.co.uk/blog/nfrc-blog/2016/01/20/corrosion-of-fully-supported-metal-roofing-the-situation  ) y están dando instrucciones firmes  para que se planifiquen bien las instalaciones y así poder evitar resultados tan negativos.

(ver imágenes)

Manuel Álvarez

 

EXPLICACIONES SOBRE PATOLOGÍAS RUINÓGENAS EN LA CHAPA DE ZINC

CREYENDO HACERLO BIEN SALE MAL.
No vasta con solo con copiar detalles y poner empeño, los conocimientos son imprescindibles para saber si lo que se copia es o no de aplicación a lo que queremos hacer. Quien sabe el resultado del original es quien lo ideó a posteriori.


(nº1 plano de cubierta)  sobre la que vamos a tratar.

la estructura  de cubierta parte de un forjado plano de hormigón que figura como techo de la última planta. ( nº 11) Tal estructura  se configura, para dar una mínima pendiente, a base de tabiques de ladrillo y correas de hierro, en sentido perpendicular a las mismas se asienta un entablado de madera,  separadas las tablas entre sí y fijadas directamente a las correas mediante elementos mecánicos roscantes  tal como se señala en la siguiente imagen.

(nº 2, entablado de madera directamente, tabla directamente sobre los perfiles)

posteriormente se instala la chapa de zinc directamente sobre el entablado . Toda la cubierta vierte a una sola agua desembocando en un canalón  que se señala con una línea roja,  ( nº1, plano de cubierta) .

-En  un buen hacer , se hizo un corte trasversal a las chapas,  (se marca con línea negra, (nº 1 plano de cubierta) . Tal corte  viene a consecuencia de aligerar la dilatación individual de las chapas ya que  de hacerlas en una sola pieza serían  excesivamente largas, conllevando el  consiguiente riesgo de roturas que pueden significar las dilataciones. Pero , este encuentro trasversal    requiere  resolverse de forma eficaz  ya que primero, la cubierta tiene muy poca pendiente y segundo, supone un punto crítico  ya que actúa como línea de fuga del gas (vapor)  que se almacene en el  espacio interior, también puede actuar como línea de succión, haciendo llegar a la dicha cámara aire húmedo  del exterior.  Tal remate trasversal  se ha resuelto como se observa en la imagen nº 3 ilustrada en el detalle nº 1. Tajantemente, el remate trasversal está técnicamente  mal realizado y con agravantes que acarrean serios perjuicios.

(nº 3. )

(detalle nº1)

-No hizo falta una visualización exhaustiva  ni minuciosa para ver el daño ruinogeno que presenta la cubierta  ya que es macroscópico y se ciñe, en primer estudio, a una corrosión  avanzada en toda la longitud de la línea de corte trasversal  (línea negra del plano de cubierta ) . La ruina, se localizo hace algunos años y se trato de reparar mediante pinturas y apósitos visibles que se pueden ver localizados en   las siguientes imágenes.

 

(nº 4 y 5, reparaciones con telas adhesivas )

A parte; se visualizan otra serie de indicios genéricos que probablemente terminen  perforando  las chapas, algún punto ya paso del indicio a ser visible la perforación  según se observa en la siguiente  imagen nº 6.

(nº 6)

(nº 7 )

(nº 8 )

(nº 9

se señalan con círculos rojos los puntos de contacto de los tornillos con el zinc, tales tornillos se ven en la imagen nº 3 en rojo ).

Independientemente de esas anomalías genéricas que presenta la cubierta , que obedecen a motivos fáciles de entender ya que se trata de una  falta de cuidado a la hora de  fijar las tablas que para más inri se fijan directamente contra la estructura  de hierro. Aunque no puedo confirmar si es en toda la superficie,  si puedo asegurar que la mayoría del clavazón sobresale de la superficie de la tabla, a consecuencia roza la chapa y así se visualiza en aumento sobre una buena parte de la superficie de la chapa (ver imagen nº 3 círculos en rojo, 7, 8 y 9).  Ya en por si no pueden sobresalir las cabezas de los clavos sobre la superficie de la tabla, si a ello le sumamos   que van unidos a una estructura metálica supone automáticamente una interacción galvánica que condena al metal  de menos potencial a su oxidación en beneficio del que entra en reducción. En este caso, es el zinc el perjudicado.

Sin embargo, la ruina de la cubierta, de momento,  se presenta en  esa zona lineal de encuentro trasversal de las chapas,  ruina que  se identifica como una corrosión de carácter electrolítico avanzada de la chapa de zinc que desemboca en su total destrucción.    A esa consecuencia, para evitar la entrada directa de agua, se ha cubierto esa superficie dañada con láminas adhesivas.

No me es desconocida la patología definida como corrosión de carácter electrolítico, la podría parangonear con otras muchas conocidas  que se producen en el mismo punto de encuentro, pero se da la circunstancia de que en este caso,  la chapa de zinc, independientemente de  descuidos, incurias o falta de conocimiento, está instalada sobre el  soporte más  idóneo.  Desde esa perspectiva,  es difícil   entender que se pueda producir el fenómeno de la corrosión.  Merece por tanto de un análisis detallado, ya que este caso concreto se disocia de otros similares, si bien la corrosión se produce por los mismos principios ,la causas  origen pueden diferir unas de otras aún para llegar al mismo fin.

El solo hecho de cortar las chapas para   favorecer las dilataciones   indica que quienes planificaron la cubierta gozan de meridianos conocimientos   sobre el comportamiento del zinc o sencillamente copiaron algún detalle que es lo más probable.  Sin embargo, esa presumible sapiencia no  va en concordancia con las siguientes fases  de la instalación. No hay homogeneidad en las secuencias de instalación, no van en el mismo orden de sabiduría, es más, denotan una absoluta ignorancia (ser legos en la materia) , que no concuerda para nada con el presumible conocimiento inicial.   llama la atención que se hayan claveteado las chapas en las zonas más críticas, pues si  se cortan las chapas para que puedan moverse y luego se clavan, no hace falta acudir a la física para reconocer que se agrava el problema y que hubiesen quedado mejor sin cortar.  Lo  más paradójico es clavar las chapas  con puntas de hierro.   (imagen nº 3, círculos negros. imagen 10 ) ,  y detalle nº 2.

Sabido es que el zinc no puede entrar en contacto con el hierro ya que termina siendo destruido por corrosión galvánica. Esto sería suficiente para concluir este informe,  es bastante este extremo para  terminar arruinando la cubierta, no solo  por corrosión también las chapas son susceptibles de sufrir roturas por tensión  ya que en estos puntos se entorpecen sus movimientos obligados por dilatación o contracción.

 

Con todo, hay que pararse a conocer el porqué la chapa se corroe  inicialmente en la zona especificada , coincidiendo en toda la longitud de la junta trasversal, insisto que no me es desconocida la patología ya que es la que más se repite, pero en este caso merece de un estudio diferente por estar el zinc instalado sobre un soporte recomendable.
Sirvan las siguientes ilustración hecha a este propósito de explicar el  fenómeno enemigo de la cubierta.

(nº 11)

(nº 12)

Hemos de centrarnos en el encuentro trasversal  para desgranar  en origen del fenómeno de la corrosión.  Si regresamos a la imagen nº 3 y detalle nº 1 (imagen que se corresponde al momento de realizar los trabajos,   veremos que se ha puesto una pletina longitudinal soldada que sirve de enganche para la siguiente chapa que irá remontada (detalle nº1) , tal remonte o solapado de las chapas se hace a propósito de asegurarse que el agua, en regreso, no rebase es final de la chapa inferior. Parémonos  aquí  ¿ de qué sirve que las chapas se remonten en amplitud si  tenemos  una pletina longitudinalmente de unos 9 cm de ancho y soldada? Ni que decir tiene que el resto de la chapa hacia atrás queda sin servicio  (ver imagen nº 13)
Pero ya no solo eso, ese trozo de chapa que queda sin servicio es precisamente la que esta claveteada y además queda próxima o pegada a la superior.
En el siguiente detalle, nº 13, se indica como vapor del que se encuentra en la cámara interior, muy probablemente enrarecido con gases químicos volátiles orgánicos, tiende a salir entre las dos chapas, la pletina soldada le supone un obstáculo y en tanto no ejerza presión que le permita ir saliendo,  ese vapor quedara custodiado entre las chapas, un obstáculo más a su salida le supone la presión exterior. El vapor que pueda quedar atrapado al irse saturando dejara depositadas pequeñas gotas de agua pegadas a las chapas, sin contar con lo que se pueda destilar, en este proceso de humectación intervendrá la acción de los clavos de hierro a lo que el zinc reaccionará, en principio con una tímida corrosión, una vez iniciada la corrosión el avance es rápido para terminar en la destrucción total de la chapa que es justo lo que ahora demuestra.


(nº 13, detalle)

Con todo lo expuesto, queda explicado el origen de la corrosión , en este caso, en el punto de encuentro de las chapas. que se traduce a: Una cámara de aire reducida entre la chapa y el forjado, a dicha cámara llega aire húmedo y vapor probablemente enrarecido por elementos químicos volátiles orgánicos que por presión osmótica llega desde el interior del edificio. Dicho vapor, siempre moviéndose en sentido ascendente, físicamente tiende a ocupar cualquier espacio, entre esos espacios se encuentra a mitad de camino y en toda la longitud  el remate trasversal de las chapas muy propicio para la salida del vapor y ahí, en parte,  se quedará atrapado, encontrándose a la vez con una temperatura inferior que le provocara la destilación, así, la humedad  que se produzca sirve de electrolito provocar la pila entre los clavos y el zinc a la vez que, por ser la molécula del agua mono polar, puede provocar la interacción entre las dos chapas del mismo material zinc. En cualquier caso, basta con que se inicie la corrosión para que desemboque en una ruina  generalizada.

Nota: Todo el contenido de este artículo está protegido por derechos de autor, se prohíbe el copiado o la difusión por cualquier medio sin permiso por escrito del autor.

Manuel Álvarez.

GOTERAS EN LAS EDIFICACIONES “Ni a cristo respetan”

PUEDEN ACARREAR LA RUINA DEL EDIFICIO.

Se define como gotera como  la continuación de gotas de agua que caen en un edificio u otro espacio techado.

las goteras de los edificios no tienen solo el inconveniente de penetrar el agua en las habitaciones, si no que,  además, pueden llegar a pudrir incluso las armaduras estructurales, llegando a oxidar los elementos pudiendo ocasionar derrumbamientos parciales  incluso la destrucción del edificio.

El agua, al pasar gota a gota, va empapando los morteros o los elementos que encuentra a su paso extendiéndose en virtud de capilaridad y crea una atmósfera húmeda caliente que contribuye a los efectos mencionados.

las goteras se deben a varias causas siendo la principal la desorganización de los tejados .
Las goteras no respetan, se conocen por aquellas grandes manchas que se presentan en los cielos rasos . los cuales, al secarse el agua se agrietan y al ocurrir nueva lluvia, penetra el agua en la habitación.

Ni a cristo respetan. Cúpula protegida por plancha de plomo con un sinfín de goteras,

Dicho todo lo anterior, las goteras, la entrada de humedad en las edificaciones traen de cabeza a sus moradores. No dejan de ser las goteras, con la destrucción que conllevan, un buen recurso para los oportunistas (alquimistas) que ofrecen remedios para todo, cuando  el verdadero remedio supone atajar el origen del daño de raíz, es decir, averiguando el origen y reparándolo de forma efectiva. El término reparar tiene un significado limpio que define perfectamente nuestro diccionario y es:  “Hacer los cambios necesarios a una cosa que está estropeada, rota o en mal estado para que deje de estarlo”.  Fácil es de entender que reparar significa volver algo desarreglado a su estado primitivo  o reemplazándolo a fin de conseguir la efectividad que se persigue.

En principio deberíamos respetar que en la actualidad, cualquier material de comercio, goza de las requeridas garantías para su aplicación, por lo tanto, el material fuera de sospecha. Pero si se manifiesta la disfuncionalidad, hay causa y, ¿ A quién se le inculpa ? ; Sin duda, hasta la fecha, en lo que incumbe en este artículo, Los materiales están a disposición, pero necesariamente se necesita la mano de obra, para su puesta en servicio.

Precisamente, del manejo y puesta en servicio de los materiales parte el origen de la de la disfuncionalidad. Los materiales se sirven y se disponen a la mano del profesional instalador para un ideal empleo. Desafortunadamente, la falta de profesionalidad y oficio acarrea instalaciones ineficaces que pueden terminar siendo ruinosas.

Resultado de una reparación, canalón resquebrajado

Ver humedad en el interior de una edificación es alarmante, produce inquietud,

Cubierta de zinc reparada con materiales sintéticos
Cubierta de zinc reparada con materiales sintéticos

máxime si se presenta exagerada. Conlleva eso a buscar remedio inmediato y no faltan quienes ofrezcan soluciones acorde con la  necesidad de resolver. Soluciones magistrales en la mayoría de los casos, soluciones inmediatas, pero sin garantías. Podríamos plantearnos una pregunta, ¿ Como alguien que no tiene ni puñetera idea de lo que es una cubierta de pizarra, de zinc, de cobre o de plomo, puede ofrecer productos diciendo que reparan definitivamente las imperfecciones de dichas cubiertas?  Ofrecen los oportunistas productos siempre sintéticos, láminas etc. Es de reconocer que las goteras se producen porque algún orifico permite la entrada de agua, es tan fácil como obstruir el agujero para conseguir la impermeabilidad. La manera más efectiva una amalgama o un producto que la porte.  Hay quienes se atreven a dar garantías de efectividad hasta de 30 años. Vamos, una coña.

Este artículo se realiza en relación a las cubiertas de zinc,, cobre, plomo o pizarra que es de lo que este autor entiende.
Cualquier defecto que presente un cubierta, sea o no causa de goteras, tiene reparación, reparación que ha de efectuarse huyendo de materiales u elementos experimentables: No se debe permitir la reparación de una cubierta de zinc, cobre, plomo. pizarra  con telas, pinturas de caucho. Tajantemente, sin abundar en la infinidad de productos que hay en el mercado. Las cubiertas han de repararse con los mismos materiales de que se componen, todo lo demás es infructuoso. las reparaciones se han de efectuar por personas con oficio, ellas se atreverán a dar las mejores soluciones. la intervención de oportunistas suele traer consigo males que llegan a la ruina general de la cubierta. ¿Como una cubierta de zinc, cobre, plomo pizarra puede llegar a repararse a base de pinturas, láminas asfálticas u otros elementos que no tienen absolutamente nada que ver con los materiales originales? Por mucho que cueste aceptarlo, hacerlo, sencillamente es un acto de irresponsabilidad. Muchas son las cubiertas que hay que retirar a consecuencia de haberse realizado esas mágicas reparaciones que en la mayoría de los casos no superan el primer ciclo de servicio. Han de ser conscientes los reparadores de que en una cubierta de zinc o cobre por ejemplo, se alcanzan unas temperaturas muy elevadas y los materiales sintéticos no las soportan, los metales expuestos tienen un comportamiento dinámico al que no le acompañan en armonía lo adyacentes que usan para las reparaciones, esto conlleva nuevos agrietamientos y así se irán sucediendo las aplicaciones unas sobre otras en medida que se manifiestan las goteras, Finalmente, amen del gasto que hubo que asumir ya no hay posibilidades de hacer nuevas reparaciones, teniendo que definitivamente retirar íntegramente las cubiertas.

M. Álvarez

observatorio

CARACTERÍSTICAS DEL ZINC, SU APLICACIÓN EN CUBIERTAS

Puede parecer lo contrario, pero una cubierta de zinc, en lo que al material se refiere tiene más importancia de la que se le suele dar,  es preciso conocer bien las propiedades y comportamiento del zinc para terminar haciendo un trabajo sin riesgos de acelerada ruina.

____________………….__________

 

Según Cohen, el zinc es un metal metaestable, es decir, que todas sus constantes físicas y mecánicas hasta ahora determinadas exceptuando su peso atómico, se refieren a sistema indefinidos. La modificación que se forma después de 330 y seis horas de calefacción en solución saturada de sulfato de zinc, de densidad 7,102, sólo se convierte  muy lentamente en la estable a la temperatura ordinaria, Según Benedick, además del punto de transformación a unos 340° tiene otros segundo análogo a unos 170°.

Se ha dicho del zinc que es un metal trimorfo: el zinc x existiría hasta 170°,  el zinc b de 170 a 330° y el zinc y de 330 hasta 419°. La polimorfia del zinc no está indicada cualitativamente de modo claro en las marcadas variaciones de la resistencia eléctrica del zinc comercial a temperaturas creciente. Por encima de 300 a 310°el coeficiente de temperatura es marcadamente negativo. Pero Arpi afirma que estos cambios no deben atribuirse propiamente al zinc , sino que son consecuencias de estar impurificado con el cadmio.

Benedick ha sostenido también que las variaciones bruscas que se observan en las curvas de resistencia del zinc a 170, 270 y 320° solo aparecen en presencia de cadmio . Sobre la superficie pulimentada de zinc que se deja enfriar desde una temperatura superior a la del punto de fusión lentamente hasta 180° aparecen grandes poliedros sobre los cuales se hallan otros mezclados más pequeños. Estos últimos son numerosos cuando se enfria el metal entre 360 y 330° y recubren toda la superficie de los grandes cuando el enfriamiento es por debajo de los 330°.

  1. Kalischer encontró que la del zinc a 0° era 7,1817 ascendiendo después de calentar a 320 hasta 330° a 7,1841. Kuhlbaum, Roth y Siedler encontraron que para el zinc destilado no prensado a 20° referido al agua a 4°la densidad de 6,1225 y después de prensado a 4000 hasta 10000 atmósferas 7,12722. En cambio, un exceso de presión y estirado en frío disminuyen la densidad. Al pasar del estado sólido al líquido el zinc se dilata, volviéndose por tanto más ligero.

La dureza del zinc es algo mayor que la de la plata y algo inferior a la del cobre. El prensado endurece el zinc, entre 80 y 90° el zinc se ablanda marcadamente, por encima de 90° se va endureciendo con rapidez, de modo que el metal a 110°se comporta como a 30° fuera de que es más quebradizo. El endurecimiento cerca de 110° requiere algún tiempo y no se presenta en el zinc puro. De 110° en adelante el zinc va ablandándose  ligeramente, al subier la temperatura hasta 200°y probablemente hasta 250°El zinc puro solo muestra endurecimiento cerca de 200°, al principiar a fundir la dureza del zinc todavía es 1½ por 100 de la que tiene a temperatura ordinaria. La dureza del zinc disminuye cuando tiene estaño y aumenta con el antimonio, aluminio, cadmio y magnesio. La acción del 4% de cobre equivale a la 0,25% de magnesio. La misma cantidad de cadmio aumenta la dureza del zinc en un 50%, el aluminio ablanda el zinc y el fósforo lo endurece.

Se consigue que el zinc adquiera maleabilidad y flexibilidad de que carece en las condiciones ordinarias a causa de su estructura cristalina, por calefacción a temperatura elevada. A temperatura ordinaria el zinc es más quebradizo y puede romperse al golpearlo con el martillo.

La maleabilidad del zinc es mucho menor que la del hierro, en cambio la plasticidad , sobre todo la del metal fundido es mucho mayor de lo que muchos creen.

El zinc se  trabaja mejor en caliente, hasta unos 150° pero a más elevada cada vez es más difícil de trabajar de modo que a 200° es más quebradizo que a la temperatura ordinaria. Hasta el punto de que se puede pulverizar en un mortero.

La dilatabilidad a diferentes temperaturas es la siguiente:

A                                                                     19°    70°   150°   250°   300°

Dilatación %                                                    1,65  300    500     3          2

Límite de carga en Kg. por mm. cuadrado        12,4  3,6     2,4     0,7       0,6.

El zinc tiene un color blanco agrisado con viso azulado y lustre metálico intenso, que se conserva si se guarda en sulfuro de carbono.

Por calefacción es el metal más dilatable, algo más que el plomo y dos veces y media más que el hierro forjado.

El coeficiente de dilatación lineal del zinc por el calor es de 0,00002905 y el cúbico entre 0 y 100° 0,000089.

Las varillas de zinc calentadas no recobran su longitud primitiva por enfriamiento.

El punto de ebullición del zinc a la presión de 760 mm. es de 920° cómo temperatura de fusión se indica la de 417°

Destacar que en contacto con el aire seco el zinc conserva su brillo a la temperatura ordinaria, en el aire húmedo se cubre de una película gris que preserva a las capas inferiores de ulterior oxidación. Esta película está formada por una mezcla de hidróxido y metal; al cabo de algún tiempo toma un color blanco por la acción del ácido carbónico formándose carbonato bárico hidratado. Este se adhiere bien pero es soluble en el agua que contenga anhídrido carbónico y amoniaco.

El aire en movimiento oxida más al zinc que el aire en reposo , según la proporción de gas carbónico que contenga el aire húmedo actúa con distinta intensidad; la acción es más enérgica en presencia de gas sulfuroso.

 

Cuando la superficie del zinc esta oxidada cesa la acción del oxigeno seco por debajo de los 150° a mayor temperatura sigue.

 

El hidrógeno sulfurado a la temperatura ordinaria actúa primero sobre el zinc hasta que se ha formado una capa protectora de sulfuro, con el vapor de zinc forma sulfuro de zinc cristalizado. Mezclado con el aire, el hidrógeno sulfurado actúa rápidamente sobre el zinc.

Los alógenos húmedos atacan al zinc.

El cloro puede ser desposeído de todo indicio de agua haciéndolo pasar por limaduras de zinc.

El cloro seco no ataca al zinc y tampoco el cloro húmedo.

chapa y madera después de 17 años
chapa y madera después de 17 años

En el agua el zinc es estable, mientras el agua este en todo exenta de gases y el zinc sea puro. En cambio, el agua actúa con energía sobre el zinc en  presencia de oxigeno, sobre todo cuando el metal unas veces está mojado y otras no. En estas condiciones se forma algo de hidróxido que es ligeramente soluble. Destaco la certeza de estos datos, puesto que en algunas de las probetas que se están analizando en Cumalsa, S.l. Durante 17 años, vamos evidenciando que en una superficie de aproximadamente 1000 m², el zinc por su parte interior está sometido a una humedad constante siendo esta humedad provocada por vapor de agua suficientemente clorada y no se aprecia ninguna corrosión. Destacar que la chapa está instalada directamente sobre entablado de madera de pino, llegando a mantener también las tablas un altísimo grado de humedad a esta consecuencia si se aprecia una exagerada corrosión en el clavazón, por el contrario el zinc no acusa ninguna corrosión mas lejos de algunas manchas de hidróxido en zonas puntuales. 

A.De la Rive, hizo detenidos estudios sobre la acción de los ácidos sobre el zinc. Esta acción está favorecida por la presencia de impurezas en el metal y el zinc puro se disuelve con alguna dificultad aún en los ácidos más enérgicos.

En sus combinaciones funciona el zinc como divalente.

El zinc no es separado de sus soluciones directamente por ningún metal, pero se separa de ellas por la corriente eléctrica.

M. Álvarez

Ventilación interior de la chapa de zinc.

NECESARIA O IMPRESCINDIBLE

Tal y como se nos explica la cámara de ventilación refiriéndose a cubiertas de zinc, no cabe razonamiento  científico  que pueda avalar  la generación tal cámara,  ni que los  elementos recomendados contribuyan a generarla. Mejor empleado estaría el término cámara de aire, que en mayor o menor medida se consigue dependiendo de los elementos que se empleen como soporte.    

En el caso de las CUBIERTAS DE ZINC, mucho se tiene hablado y se habla  de la ventilación interior y su importancia. EL ZINC, que se emplea en cubiertas, es un material muy peculiar y merece de exquisitos cuidados para que de un resultado optimo, de no tener unos buenos conocimientos sobre el comportamiento en el tiempo de este material y aplicarlos ,   el resultado de la instalación a no muy largo plazo puede resultar  ruinosa. Precisamente, según nuestros estudios,  no es la ausencia de la mal llamada cámara de ventilación la que origina la ruina del zinc. 

Hemos asistido a restauración de cubiertas con una antigüedad importante realizadas con hoja de  zinc que curiosamente carecían de cámara de aire. ¿ ES IMPRESCINDIBLE QUE EL ZINC ESTE VENTILADO POR SU CARA INTERIOR? . Para asegurarnos podemos decir que si, si tenemos en cuenta lo que hemos visto quizás podríamos aventurarnos sobre lo contrario. Asistimos más a la reparación de cubiertas fruto de instalaciones   deficientes  que a causadas por perforaciones consecuencia de una deficiente o nula ventilación.

El zinc, en nuestro país en los inicios se ha instalado  mayormente en zonas portuarias, en el centro y edificios singulares de algunas ciudades,  se ha empleado en fachadas y cubiertas. De estas podemos extraer algunos datos, el principal es que se han cuidado más de asegurarse los instaladores de que el zinc tuviese libertad de movimientos que de una buena ventilación.
Nos tenemos encontrado con cubiertas realizadas sobre yeso, únicamente separada la chapa por un papel intermedio, en ocasiones también hemos asistido a reparaciones de cubiertas instaladas directamente sobre entablado de madera sin ninguna ventilación. ¿ Y cual ha sido la causa por la que muchas cubiertas han llegado  a la ruina? Perforaciones y roturas por fatiga.   observadas las perforaciones, en su mayoría eran iniciadas desde el exterior, causadas por la polución ambiental, las roturas por fatiga por muy controladas que estén las dilataciones, a lo largo de los años suelen producirse en algunos puntos concretos, lo que se pudo evitar con inspecciones periódicas y reparaciones eficientes. Ocurre, en la mayoría de los casos, que decidimos intervenir en la cubierta cuando vemos la humedad, si bien, esta en muchas ocasiones se manifiesta a nuestra vista cuando lleva años produciéndose, por ello es recomendable revisar las cubiertas con cierta frecuencia. Hay que añadir que, prácticamente todas las cubiertas están realizadas con junta de listón y con chapas de máximo 2 metros.

En los últimos años, el empleo de ZINC EN CUBIERTAS ha sido masivo. La oferta de profesionales muy escasa, nos hemos ido instruyendo a base de ir viendo los resultados, es decir que de los errores hemos ido adquiriendo el oficio. El laboratorio de ensayos es el paso de los años. Claro, que si el ensayo sale mal, la ruina es para quien decidió que su cubierta se realizase en ZINC.

VEAMOS: Hay quien recomienda a pies juntos el siguiente soporte; SOBRE UN FORJADO DE HORMIGÓN, UN ENRASTRELADO, UN PANEL CONTINUO y SOBRE EL UNA LÁMINA ALVEOLAR. SOBRE TODO ESTO LA CHAPA DE ZINC.

LA PRIMERA PRECISIÓN: la losa de hormigón, indudablemente tiene un contenido importante de humedad, sobre ella instalamos el rastrel para fijar los tableros, dejamos por tanto una cámara entre la losa y el tablero, esta cámara es hermética, ¿ qué ocurrirá ahí dentro. Para más abunde, ponemos una lámina sobre el tablero, lo que ayuda a que esa cámara quede con la mínima o nula transpiración.

Instalado el zinc en este soporte, entre la chapa y la lámina entenderemos que quedan bolsas de aire, estas al calentarse aumentan su volumen y obligan a la chapa a hacen movimientos llegando muchas veces a deformarse, estos movimientos continuados, son causa de la rotura por fatiga. PODRÍAMOS QUEDAR MÁS SEGUROS SI PROCEDIESEMOS DE LA SIGUIENTE FORMA:

SOBRE EL FORJADO, INSTALAMOS LOS RASTRELES Y POSTERIORMENTE UN ENTABLADO DE MADERA DE PINO  SEPARANDO LAS TABLAS 10 MM.  Y SOBRE ELLAS DIRECTAMENTE EL ZINC. QUEDARÍA GARANTIZADA UNA BUENA CÁMARA DE AIRE Y LAS DEFORMACIONES DEL ZINC SERÍAN INFINITAMENTE MENORES Y A PODER SER LA INSTALACIÓN TRATARLA POR EL SISTEMA DE JUNTA DE LISTÓN.

M. Álvarez

 

CUBIERTAS DE CHAPA DE ZINC

Please add your content in this area.

CUBIERTAS DE CHAPA DE ZINC.

INVITAMOS A NUESTROS LECTORES DISPUESTOS A CONSUMIR UNA CUBIERTA DE ZINC, A QUE ANTES DE DISPONERSE A HACERLA REPASEN ALGUNOS DE NUESTROS ARTÍCULOS RELACIONADOS CON EL COMPORTAMIENTO DE LA CHAPA DE ZINC EN CUBIERTAS, O SE SURTAN DE INFORMACIÓN AL RESPECTO.  (SON MUCHAS, DEMASIADAS LAS CUBIERTAS DE ZINC QUE PRESENTAN RESULTADOS NEGATIVOS QUE SE PUEDEN ATRIBUIR MAYORMENTE A LAXITUD EN LA NECESARIA PLANIFICACIÓN)

El zinc se utiliza  en construcción como material de cubrición desde hace muchos años, si bien en las últimas décadas su empleo ha sido masivo al menos en nuestro país, aunque en la actualidad está mermando su empleo . El zinc de comercio, llamado natural, que se emplea para cubiertas , tiene un color  blanco agrisado con viso azulado y lustre metálico intenso, color que una vez instalado pronto desaparecerá. (ver cambio de color en la chapa de zinc)

pieza de zinc nº 12 (cámara de comercio de Orán) data del siglo XlX

Antaño se empleaba la chapa de zinc para la cubrición de edificios muy singulares y ornamentaciones destacadas, curiosamente se observa más en ciudades portuarias quizá por las facilidades del transporte y la importación de otras culturas.
La instalación antiguamente era muy artesanal, las ornamentaciones eran de serie, estampados idénticos que se repetían  en la mayoría de los ornamentos. Fuera de nuestras fronteras,en diversos países,  se pueden contemplar remates estampados procedentes de una misma fábrica. Diferentes culturas arquitectónicas   han utilizado mucho el zinc en sus edificios emblemáticos, tanto para cubrirlos como para adornarlos con majestuosas cúpulas, linternas  y chapiteles. Podemos contemplar algunas edificaciones muy antiguas cubiertas con “tejas de zinc”  romboidales o de pico,  que en la actualidad están casi  intactas, lo que viene a significar que el zinc es metal fiable.

En España a diferencia de otros países con más cultura en la instalación, el trabajo de colocar el zinc se reservaba a los hojalateros, por aquello de que sabían estañar y contaban en sus talleres con  herramientas con las que podían manufacturar las chapas, generalmente alguna plegadora. El empleo principal dela chapa de zinc era en canalones, bajantes y escasas cubiertas de chapiteles, miradores,   fachadas o algún que otro palco ornamentado en plazas públicas. Todas las instalaciones estaban lejanas de los sistemas que se siguen en la actualidad. Todo lo que nos encontramos de antaño esta realizado con juntas en lo que media una pieza longitudinal de madera de  pinus, se le suele llamar junta belga, también junta de listón. Para darle más ímpetu,nos orientan hacia un listón de forma trapezoidal, curiosamente no hay concordancia en como se instala, unos dicen que apoyado por la base mayor, otros que por la menor, Nuestros antecesores se limitaban a un rastrel cuadrado o rectangular sin más. 

A diferencia de España, En otros países si podemos ver edificios muy antiguos cubiertos totalmente con zinc. Curiosamente aquí , hasta hace unos años  hemos contado con una importante fabrica de zinc, concretamente en Lugones (Asturias) , la que se llamó Asturiana de zinc, allí  se laminaba también zinc para construcción y se servía generalmente  en chapas de 200×100 cm. las que conocíamos para su empleo en cubiertas  se sellaban con los números  10,12 y 14. Ello no ha significado que el zinc se emplease como material principal de cubrición en nuestro geografía, pues le superaban la pizarra y la teja. Más bien se utilizaba para ornamentaciones, cúpulas, chapiteles, algunas cubiertas de edificios muy singulares y en zonas muy determinadas. Si ha tenido una presencia muy activa en todas las  cubriciones de pizarra, toda la rematería se realizaba con chapa de zinc, en contadas ocasiones con plomo y una mínima presencia de cobre; lo mismo sucedía en las cubriciones de teja. Era de tal importancia económica la repercusión de los “forrados metálicos” así se los llamaba, que una cubierta que llevase pocos remates no interesaba, hasta el punto de que cuando se empezó a implantar el zinc como material principal, los precios que suben y los avispados que se dan cuenta , de un acelerón descubren  el aluminio lacado en negro o la chapa lacada que como es negra también y conjuga con la pizarra, ala, el zinc ya no es tan bueno, para hacer cubiertas si, pero para los remates no y eso solo porque el sustituyente es de color negro. (Conscientes del interés de nuestros lectores, de estos cambios interesados de costumbres hablamos en nuestro apartado técnico)

El bum de construcción que hemos vivido trajo consigo el empleo masivo de materiales que apenas antes se empleaban. El Zinc, sin lugar a dudas, se adapta a cualquier tipo de construcción y aunque sea cosa discutible no deja de aportar cierta identidad asociada con la calidad. A la vez que se promocionaba  el empleo de zinc en cubiertas empezaron a aparecer máquinas, herramientas más diferentes para realizar los  trabajos de manufacturación, también diferentes ofertas de acabados y accesorios que los mismos vendedores facilitaban a los espontáneos instaladores.  La falta de oficio y escasa cultura en el conocimiento del comportamiento del metal, no tardo en dejarse notar con resultados muy negativos incluso la ruina de muchas cubiertas.

A la hora de planificar una cubierta de chapa de zinc, es primordial  tener en cuenta algunos factores,  por ejemplo: la ubicación de la edificación, su complejidad y muy importante el soporte, entendiendo este último como elemento sobre el que la chapa va a descansar y a estar en contacto permanente de por vida. Igualmente es importante el definir bien los diversos remates y el modo de resolverlos. Partiremos de la base de que la chapa de zinc tiene muy poco grosor, tiene un coeficiente de dilatación muy alto (2,9 mm. a 100°), La dilatabilidad del zinc cambia a diferentes temperaturas. Se debería tener un escueto conocimiento físico químico  del comportamiento del zinc antes de acometer cualquier trabajo. Comparando con el cobre otro metal muy empleado y para el que se siguen protocolos de instalación similares, el zinc es ligeramente más blando y aunque se trabajan de forma similar  requiere minuciosos cuidados. Su maleabilidad es mucho menor que la del hierro. Se trabaja mejor en caliente, hasta 15°, pero a 200° es más quebradizo que a temperatura ordinaria.  Téngase en cuenta que entre 80 y 90° el zinc se ablanda marcadamente, por encima de 90° se va endureciendo con rapidez, de modo que el metal a 110° se comporta como a 30º.  Fuera de que es más quebradizo, de 110° en adelante el zinc va ablandándose ligeramente al subir la temperatura hasta 200° y probablemente  hasta 250°. Estos factores han de tenerse en cuenta a la hora de perfilar, plegar o golpear la chapa, sobre todo en épocas de frío. Con temperatura muy baja el zinc rompe con mucha facilidad, para evitarlo algunas veces se acude al calentado de la chapa de forma descontrolada y se puede conseguir lo mismo o peor que si se trabajase en frío. Lo mismo sucede cuando se estaña en uniones que requieren de soldadura,( tema del que hablaremos en otro apartado)

Kalischer

 Kalischer encontró que la densidad del zinc a 0° era  7,1812 ascendiendo después de calentar a 320 hasta 330° a 7,1841. otros investigadores tales como Kuhlbaum, Rot, y siedler encontraron otras densidades para el zinc en diferentes estados, textos al alcance sitúan la densidad en 7,14. Es de potencial negativo (-0,76) con respecto al hidrógeno, por tanto tendente a ceder electrones y quedando a la postre con carga positiva, por otra parte  su coeficiente de dilatación lineal por el calor es muy alto  0,00002905  y el cúbico entre 0 y 100° 0,000089. Por calefacción es el material más dilatable algo más que el plomo y dos veces y media más que el hierro forjado.

Se debe atender especialmente a procurar que las chapas de zinc en su instalación gocen de libertad para moverse y su soporte sea compatible. A diferencia de lo que se suele recomendar como una cámara de ventilación efectiva, si tenemos en cuenta algunos resultados, la cámara de ventilación es de dudosa necesidad o al menos utilizando materiales compatibles, no la consideramos estrictamente necesaria. Volvemos a insistir que es más importante que el soporte no ofrezca dudas. También se debe huir de hacer chapas demasiado largas, más recomendable es hacerlas cortas, no más allá de los 5 metros  cuidándose de que las fijaciones garanticen la movilidad. Por supuesto, los encuentros y remates, si no se pueden garantizar con pliegues hay que utilizar estaño al 50%, huir de emplear estaño al 30% y  jamás  resolver con masillas o siliconas. A ser posible, la estructura ha de tener suficiente pendiente para que al menos no haya posibilidad de que quede agua estancada, pues en las zonas de estancamiento se suelen acumular residuos sólidos, estos pueden portar ácidos orgánicos, a la vez que terminan siendo altamente higroscópicos y pueden provocar corrosiones en la chapa. En cubiertas que por necesidad tengan poca pendiente se debe procurar alguna limpieza máxime si hay vegetación arbórea cercana.

La chapa de zinc, en la actualidad, se sirve mayormente en bobinas de diferentes tonelajes, también de diferentes grosores y acabados. Con esto tenemos suficiente para proyectar el tipo de cubierta de que se nos antoje. Importante tener en cuenta que los diferentes acabados son solo  superficiales de la chapa que en teoría se van a ir degradando en el tiempo, si bien ofrecen, a priori,  una acabado  diferente. Si tomamos como base la chapa de zinc de acabado natural, nos referimos a metal de color plateado muy brillante, que se va a ir transformando en su parte vista. Ya lo dictamino W.H. Seamón que el zinc mismo resulta protegido por la capa que el se forma por la acción del aire, él mismo decía que parecía ser que dicha capa hace al zinc muy resistente aún para el agua que contenga 0,5 gr, de anhídrido sulfuroso o de anhídrido carbónico por litro. A consecuencia de la combinación con el  aire húmedo de la atmósfera renovada va a ir creando una capa de carbonato básico e hidróxido, lo que tradicionalmente se llama pátina, ella va  a proteger la chapa, su color termina en un gris mate, entendiéndolo como oscuro y sombrío.

Si tenemos en cuenta que la reacción del zinc  estando a la intemperie es inevitable y a la vez necesaria, pues el recubrimiento de la capa de carbonato va a ser homogénea protegiendo toda la superficie y así  a evitar las posibles agresiones atmosféricas u otras. Es de entender que la degradación de las chapas que se sirven provistas de diversos acabados a la hora de irse degradando tales acabados, las degradaciones no van a ser ni excesivas ni homogéneas, entendiendo que más bien van a ser puntuales, por tanto nos sería fácil deducir que en aquellos puntos en los que vaya quedando el zinc sin la previa  capa, se van a producir la típica reacción soltando a la vez hidróxido, pero el punto que reacciona no se va a ver favorecido por otras aportaciones próximas, lo que significa que se va a ir perdiendo materia sin compensación y ello podría provocar alguna picadura, aunque esto no esté científicamente comprobado, si vemos que  los pre-patinados son más proclives a reacciones dudosas.

 SOPORTE PARA CUBIERTA DE CHAPA DE ZINC

Mención destacada merece este apartado. El soporte, más allá de los cuidados a tener en cuenta en el momento de la instalación,  tiene una importancia vital para la ulterior vida del zinc, se vienen manteniendo una serie de teorías respecto al comportamiento interior de la chapa de zinc y se da como solución más fiable la de procurar una mal llamada cámara de ventilación, se suele aconsejar una lámina alveolar, la mal llamada lámina de ventilación. Entenderíamos mejor si precisásemos diciendo por ejemplo que es una lámina de polietileno de nódulos intercalados ( erosiones) elementos que permiten cierta circulación de aire entre la lámina y la chapa. No todas llevan como componente único el polietileno, Eso si, el nombre comercial en muy importante, pues parece ser que no todas las láminas tienen las mismas prestaciones . Ha surgido un gran dilema de  si unas son mejores que otras, todo a consecuencia de que se están manifestando corrosiones importantes en las hojas de zinc,  no falta algún alquimista que atribuye a las corrosiones como causa algunas marcas de la dichosa lámina, si bien tienen la solución  recomendando otras como majestuosas que para darle más ímpetu y credibilidad las etiquetan con unos precios desorbitados. El caso que los vendedores les atribuyen resultados magistrales a cada cual venden. Cuando surge  este tipo de debates se llega a la conclusión de que algo de turbio hay,  ¿ si unas son mejores que otras y de ellas puede depender en cierto modo la durabilidad del zinc, Si entendemos la cubierta de zinc como duradera, que pasa con las que ya tienen puesta  esa lámina “mala ” o no tan buena? . Los diversos estudios, las numerosas pruebas y ensayos, la numerosa información que llevo contrastando me van haciendo llegar a ciertas conclusiones que en otros textos voy desgranando,  como avance puedo decir que igual los que hablan de la lámina como posible elemento causante de las corrosiones, sin tener en cuenta lo que se entiende como corrosión polimérica, carecen de razón, aunque sí, algo puede tener que ver la lámina, pero no tanto como los ayunos creen. Si desgranamos teniendo  en cuenta diversos factores químicos y físicos muy complicados, que no son desconocidos,  puede que encontremos alguna reacción entre la lámina y el zinc, pero vamos a ser claros y decir que la verdadera misión  de la lámina es separar el zinc del soporte y eso es lo que debe mantener, mantenerse inalterable para conseguir en el tiempo un perpetuo  aislamiento entre los elementos madera, tableros u otros incompatibles y zinc.    En el contraste de información me he encontrado algunas empresas se atreven a promulgar que la cámara de ventilación es imprescindible sin dar el más mínimo  razonamiento, aportando como aval  científico el de la auto alabanza de decir que se llevan “x” años el sector. No tengo ningún reparo en decir que en un principio he aconsejado lo de que la cámara de ventilación era absolutamente necesaria, como igualmente era  absolutamente profano en el conocimiento del zinc, seguía las indicaciones de vendedores de reconocidas firmas alentado a la vez  por  providencia divina, bien es cierto que siempre realice, inconscientemente, cubiertas sobre maderas que al final me he dado cuenta que son compatibles, eso sí, sin tener idea. Después de diversos estudios, prácticas y años de investigación, se llega a la conclusión de que los que aconsejaban no tenían ni puñetera idea y si la tenía la ocultaban. Era más importante adornar el producto zinc,, del que la madre Marketing cada poco  paria una novedad más novedosa, asistiéndole de las infalibles herramientas, las máquinas y los adyacentes homologados, todo homologado y con ello se conseguiría una cubierta inigualable, Permítase una expresión  muy utilizada en las redes sociales, ” ja,ja y muchos jas” ¿ y cuando el zinc se corroe  que?, nadie se atreve a difundir conclusiones mínimamente concretas, puede que la lámina, agentes atmosféricos instalaciones deficientes o algún espíritu toca narices sean los causantes. 

Jacques Dony Daniel
Jacques Dony Daniel

Lo de que el zinc es un material apto para cubiertas jamás lo vamos a poner en duda, ni vamos a entrar en este apartado en el organismo del mismo para destripar todos sus componentes,  aburrirían sabiendo que estamos ante un metal de calidad y eso encierra suficiente como para fiarse de él. Claro, si se ven resultados negativos hay que averiguar el porqué y dignamente informar, pese lo que pese y a quien le pese.  Igual si los fabricantes se dedicasen a vender zinc informando debidamente y dejarse de aconsejar hasta casi imponer complementos mágicos sin contrastar en el tiempo, quien sabe, posiblemente los resultados podían ser otros.   Ya desde 1805  en que JeanJacques Dony Daniel, estableció el sistema belga de producción,  investigadores de prestigio dan como óptima la hoja de zinc para su empleo en cubiertas advirtiendo que no debía  sujetarse con clavos a las maderas pues resultaría pronto corroído por los ácidos de esta última. si bien daban como buenas las pináceas. Aquellos de la época no  eran muy claros a la hora de dar detalles, sabido es cómo se lleva esto de las investigaciones y cómo actúa cada investigador a la hora de dar a conocer sus tesis,  pero no estaban  ayunos de razón ya que es verídica la repercusión negativa de algunas maderas hacia el zinc. Por otra parte, podemos asegurar que lo de ser imprescindible la cámara de ventilación en sentido genérico es  rigurosamente falso, pues tenemos datos de cubierta sometida a humedad constante durante años suficientes para poder asegurar que no a tenido la más mínima repercusión negativa, Igualmente tenemos datos de cubiertas realizadas hace más de 30 años estando el zinc instalado sobre cartón sin ninguna cámara de aire intermedia,  sin embargo si tenemos datos que con la majestuosa cámara de ventilación en corto periodo de tiempo el zinc terminó corroído en diversas zonas.  y otros de igual o peor resultado en zinc instalado directamente sobre láminas lisas.    Por el simple hecho de dotar la parte interior de esta lámina parece ser que queda todo resuelto, pero la realidad es en muchos casos bien distinta, pues vamos encontrando cubiertas con corrosiones importantes y en su mayoría están dotadas de este sistema de lámina intermedia. Nuestra opinión es que estas láminas sirven únicamente para separar la chapa del soporte que generalmente suele ser tablero aglomerado. Pues es bien sabido que la mayoría de los tableros portan un PH muy alto en acidez por debajo de 5 y ello termina repercutiendo en la chapa si hay algún tipo de comunicación acuosa, pues ella terminará haciendo de electrolito y se formara una pila entre el tablero y la chapa, cediendo electrones el zinc y quedando con carga positiva, a la postre corrosión garantizada.  Si atendemos a las indicaciones de antiguos investigadores, no hay conclusión definitiva si de no existir solución acuosa puede incluso repercutir la negatividad.

Nuestras recomendación es procurar un soporte a base de tablas de madera de pino, sabido es, por estar así demostrado, que la madera de pino está con un PH entre 5 y 7, por ello es perfectamente compatible y se puede poner el zinc directamente sobre ella, si conviene que la tabla  este un poco separada para favorecer el paso de aire. Se está observando que aunque se produzcan condensaciones no afectan negativamente al zinc. Sin duda que el soporte de tabla puede resultar un poco más costoso que el tablero, pero el resultado justifica con creces la diferencia de precio que pueda haber. La formula más recomendable es instalar rastreles de madera en el mimo sentido de las pendientes, estos rastreles de 40 x 30 mm.  fijados al soporte estructural, bien sea hormigón, o incluso tableros tipo sándwich, llevarán una separación entre 35 y 50 cm. Posteriormente y en sentido perpendicular se realizará el entablado con tablas de no más de 15 cm. de ancho por 22 mm. de grueso, clavadas convenientemente de tal forma que las cabezas de las puntas queden incrustadas  y separadas las tablas entre si  no más de 20 mm. De esta forma quedara garantida una cámara de aire. Se debe de tener en cuenta, que el zinc no debe de estar en contacto con otros metales, ejemplo el hierro y a ser posible se debe de evitar que reciba aguas procedentes de otros metales, pues ellas pueden transportar iones y repercutir negativamente en la chapa.

LA INSTALACIÓN

Elegiremos un grosor de chapa no exagerado, pero si abundante, se suele comercializar en muchos espesores, podemos citar  0,5, 0,65, 0,7, 0,8, 1 mm. …. 0,7 mm. puede servirnos. De aquí podemos calcular el peso por m/2 que se despejara multiplicando el espesor por la densidad. A ello le añadiremos un porcentaje dependiendo de la complejidad de la  cubierta, generalmente se viene aplicando un 25%. Si es junta de listón se puede incrementar un 5%..La chapa de zinc para cubiertas viene regularizada, pueden conducirnos a engaño algunos añadidos tales como “aleado al cobre titanio”. Lo que muchos dan en llamarlo zinc titanio, la realidad es que estos aportes en la fundición son ínfimos y lo vemos más como una cuestión de marketing. Si nos hemos percatado que no todos los fabricantes presentan la chapa con la misma textura de la misma forma que el comportamiento a la hora de irse creando la pátina no es igual en todos. Aunque en términos generales podríamos confiar en que el zinc que está en el mercado es   perfectamente apto.

 

entrando en perfiladorajunta alzada

Los sistemas de instalación se mueven entra la junta alzada o la junta de listón. En raras y especiales ocasiones se utiliza también la junta plana.  Ofrece cada una de ellas un aspecto muy diferenciado. Tengamos en cuenta que la junta de listón va a presentar un volumen de unos 6 cm. aproximadamente y la junta alzada  2. La junta plana se     eleva 1 cm. por la anchura que se le quiera dar.

La junta alzada, es la más extendida, la chapa se manufactura en   máquinas  especiales que por un sistema de rodillos la van moldeando a ambos lados de tal forma que posteriormente se pueden ir uniendo unas chapas con otras para terminar  “engatillandolas” las fijaciones se hacen con grapas que pueden ser fijas o móviles, las móviles permiten el movimiento de las chapas. Este tipo de instalación es mucho más cómoda rápida, a la vez conlleva menos material que la otra citada. Se debe tener especial cuidado a la hora de perfilar, la máquina debe de estar bien ajustada para que la chapa no sufra al irse doblando a la vez también hay que procurar que haya una temperatura más bien elevada , el mismo cuidado, en cuanto a la temperatura habrá que tener cuando se trabaje la instalación y sobre todo cuando nos dispongamos a hacer los engatillados, una temperatura baja puede facilitar la rotura del zinc. El factor temperatura, se debe de tener en cuenta sea cual sea el tipo de instalación. En épocas de invierno, cuando es necesario hacer pliegues, se suele ir calentando previamente la chapa.

La junta plana se suele utilizar para cubriciones muy especificas, de muros, aleros, techos  u otras en las que no conlleven mucho o ningún  riesgo, pues no son tan seguras como cualquiera de las otras.junta plana

Ni que decir tiene que en cualquier tipo de instalación que dispongamos hacer, se debe   procurar que las chapas gocen de plena libertad para moverse, no han de estar en contacto con otros elementos metálicos o propios de construcción, se debe  aportar algún separador.  Laminas de zinc, aplicadas directamente sobe ladrillos  que contengan al menos 1,4% de sales solubles en tiempo húmedo  inmediatamente se corroen.  

Los remates han de resolverse   mediante pliegues, engafetados u  otros que garanticen la estanqueidad y por supuesto no ofrezcan riesgo de resquebrajarse. Ante la duda se puede acudir al estañado de uniones. Nunca se acudirá a resolver uniones mediante remaches, masillas o siliconas. Cualquier oficial ha de gozar de destreza y habilidad suficiente para resolver los remates debidamente con el propio material, para ello hay herramientas especiales que permiten hacer cualquier tipo de trabajo complicado con las máximas garantías.

LOS CANALONES

Especial importancia tienen los canalones en una cubierta. Creemos que por motivos estéticos, se tiende a proyectar canalones interiores,   lo que lleva implícito  asumir un importante riesgo, pues cualquier fuga va a repercutir directamente en el interior y se termina sabiendo cuando el agua se hace visible y a traspasado todo el soporte, muchas veces las fugas son ínfimas y cuando se ve la humedad ya ocasionado el gran desastre en el soporte,. Por eso hay que poner especial empeño a la hora de instalar canalones máxime  si son interiores o de pesebre como vulgarmente se les suele llamar.

El soporte del canalón ha de ser exactamente igual al que lleve el resto de la cubierta y a poder ser dotarlo de algún  elemento aislante, pues se suelen producir fuertes condensaciones. La base debería de ser semicircular y siempre con pendientes suficientes hacia las bajantes. Las bajantes que han de calcularse con respecto a la superficie de cubierta, entre ellas hay que hacer juntas de dilatación, si puede ser no más lejanas de 6 metros. Por comodidad, se han empleado y aún se emplean juntas de dilatación de neoprenIMG_2286o, que consisten en una banda que embebe a ambos lados una chapa de zinc que posteriormente se suelda a las chapas de canalón, esta banda permite los movimientos de las chapas, pero hemos comprobado que no son eficaces, pues terminan rompiéndose, de modo que lo mejor es acudir al sistema tradicional que consiste en: soldar los cabezales de la chapa de canalón, dejarlos separados y cubrirlos con una posterior capota, para esto ha de haber pendiente suficiente para que el agua no se estanque. Pero de poco sirve todo esto si no atendemos a dejar holgura suficiente para que se pueda mover la chapa y a la vez no fijamos debidamente de tal forma que las chapas puedan moverse con absoluta libertad. No es raro ver canalones clavados  en vez de estañados, remachados en las uniones y con una capa de silicona.

Las uniones han de estañarse siempre con estaño al 50%.. Solemos recomendar que se hagan unos aliviaderos, que servirán para en caso de obstrucción de las bajantes el agua pueda salir libremente al exterior, pues de lo contrario entraría hacia el interior.

CANALONES COLGADOS

Respecto a los canalones colgados, pueden ser de sección redonda o cuadrada de desarrollo variables, no deberíande exceder de 35 cm. Generalmente son más estables los de sección redonda, pues no acusan tanto las deformaciones y conducen mejor el agua hasta las bajantes.

Se suelen servir en piezas de 2 y tres metros que se irán uniendo con estaño, aunque no es raro verlos unidos con silicona, lo cual nunca se debería hacer. Hay que procurar suficientes  juntas de dilatación, que se distribuirán entre bajantes . Las juntas de deben resolver de la misma forma descrita  para los canalones de pesebre. los canalones colgados  van soportados por unas palomillas que describen la misma figura del canalón y van fijadas al alero, han de ser suficiente rígidas y no quedar demasiado distanciadas, 50 cm. sería lo ideal. En algunos casos, dependiendo de la zona geográfica se suelen reforzar con tirantes superiores para que aguanten las sobrecargas.  Para resolver las esquinas, juntas de dilatación, y bajantes, existen piezas normalizadas que evitan las soldaduras en obra permitiendo así mayor agilidad en la instalación, respecto a las conexiones de bajantes, igualmente existen embocaduras especiales que evitan tener que soldar los tubos directamente contra el canalón a la vez de que permiten una mejor evacuación.

BAJANTES

Las bajantes vienen normalizadas de fábrica, de sección redonda o cuadrada, se sirven en piezas de dos o tres metros , unidas longitudinalmente mediante engatillado o electrosoldadura, son  diferentes secciones, las más empleadas son de 80 o 100 mm. han de ir acordes con la sección del canalón que empleemos. Es recomendable en la parte más cercana al canalón poner una cazoleta que a parte de ser un elemento decorativo, sirve mayormente para que en caso de atascamiento el agua se despeje por ella. En la instalación, las bajantes se embocan unas en otras y se fijan fijar a los paramentos verticales mediante abrazaderas. Es conveniente no apretarlas demasiado para que puedan moverse en caso de dilataciones.

REPARACIONES

 ¿Cuál es la causa que obliga a las reparaciones?

En teoría, una cubierta de zinc no tendría que acusar  ningún problema y por tanto no requerir de reparaciones, pero   la realidad es bien distinta. Nadie se supone a priori, que una cubierta de chapa de zinc llegue a permitir  filtraciones de agua suponiéndola como funcional en el tiempo.

Concebimos el material como de larga  durabilidad, que además da un aspecto singular y de carácter a cualquier edificación. Por otra parte,  hay una variada oferta de acabados que,  se amoldan a las necesidades estéticas más exigentes imaginables por cualquier facultativo de la construcción que quiera dar una nota añadida de singularidad a sus obras. ¿ pero, que está ocurriendo?.

Con el paso del tiempo,  vamos asistiendo a ritmos cada vez más agigantados a la vista de cubiertas que están dando serios problemas mayormente presentan agrietamientos y corrosiones, ello requiere de un análisis en profundidad para averiguar las principales causas y así poder llegar a remedios eficaces. Lamentablemente muchas veces se llega tarde y la solución conlleva únicamente al desmontaje integral de la cubierta y a la vez su soporte.

El zinc laminado está perfectamente concebido para su utilización como material de cubrición y así lo demuestran infinidad de obras realizadas por todo el mundo. Son conocidas cubiertas muy longevas y sin acusar más defectos que los típicos de cualquier cubierta de semejante calidad, quizá que por falta de mantenimiento haya engroses de elementos sólidos sobre la cubierta o en los canalones, algún ínfimo fallo en remates complicados o incluso podría manifestarse alguna rotura causa de fatiga en remates o pliegues excesivamente complicados. 

Tenemos que diferenciar esos resultados negativos provenientes de causas típicas de otros más preocupantes como pueden ser las corrosiones, que manifiestan de interior a exterior. Sin duda que algo muy  negativo tiene que suceder en esa  parte oculta para que sucedan tales ruinas.

Aún en la actualidad, durante la instalación,  se están resolviendo algunos remates con siliconas o masillas , sabido es que eso no funciona en el tiempo. Los remates han de hacerse con plegados o soldándolos con estaño al  50%, atendiendo siempre a las posibles dilataciones, realizándolos oficio experimentado garante de pericia y si cabe moralidad, pues para este oficio de instalador de cubiertas de zinc que a su vez en ocasiones le tocará reparar, no vale con que el operador se suponga poseedor de arte y ciencia competente. no, ha de demostrarla. sería menester exigir del operario que se dedique al oficio una formación especial, de carácter marcadamente centrado en la materia.

 

2-union-rasgada
canalón unido con silicona, véase como esta rasgada
retirada-de-silicona-y-limpieza
Se ha limpiado la silicona para poder soldar con estaño
soldadura-rematada
Finalmente se soldó la unión con estaño como se debió hacer en un principio

Vemos con frecuencia Canalones unidos con elementos sintéticos como los que representamos en las imágenes anteriores,  al igual que juntas de dilatación resueltas con materiales de caucho o neopreno. Estos, por lo que hemos visto en algunas zonas tienen una vida limitada no más allá de los 6 años, parecido ocurre con las juntas resueltas con sellados. Aunque también nos encontramos con soldaduras de estaño reventadas. En el primer caso, ya sabemos que las soluciones con elementos sintéticos no son las óptimas ni van acordes con la durabilidad de la chapa de zinc. En el segundo caso, cuando el estaño revienta es causa de déficit en la aplicación.

Cuando se acomete una reparación de esos elementos que no funcionan hay que recurrir a tratarlos como si fuese de origen, es decir, eliminar   los elementos que no funcionan o se sabe que causan el daño,  sanear las zonas afectadas y empezar de nuevo con plegados o estañados   cueste lo que cueste. Lo que nunca se debería de hacer es parchear sobre lo hecho, pues así lo único que conseguimos es agravar el problema. Pongamos un ejemplo acompañado de imágenes. Si en un canalón no funcionan las juntas selladas, eliminamos los sellados, limpiamos y soldamos debidamente y así tendremos el problema resuelto. No se debe acudir a otros elementos y claro que si se puede estañar, de no poder hacerlo se sustituye la parte afectada y se hace de nuevo. Lo mismo ocurre con los agrietamientos en las chapas. Hartos estamos de ver como se cubren con telas o pinturas, no estamos en desacuerdo con estos materiales, pero sirven para lo que sirven, no para solucionar definitivamente problemas sobre la superficie de la chapa de zinc.

corrosión que se producen en la cara interior de la chapa
corrosiones que se producen en la cara interior de la chapa
otra-vista-de-corrosion
corrosiones que se visualizan en la superficie de la chapa

 

Mención muy distinta merecen las corrosiones de la chapa. Este asunto nos trae de cabeza, pues para entendernos, se trata de que la chapa de zinc se va descomponiendo. No vemos que muchos se atrevan a hablar de este fenómeno tan   frecuente. Asistimos  en diferentes puntos de nuestra geografía a demasiadas cubiertas que acusan esta patología.  La corrosión de la chapa de zinc es el principal problema de ruina de muchas cubiertas. Ya lo hemos comentado al principio, la chapa de zinc no debería dar ni el más mínimo problema, eso sí, hay que trabajarla en    condiciones determinadas.

corrosiones-2
Corrosiones en la chapa ( vistas al microscopio )
dscn3886
corrosiones en la chapa

Cuando ocurre este fenómeno, ya demasiado extendido, nadie se pone de acuerdo en cual es la causa, pero la hay, claro que la hay. Lo llamativo es que la mayoría de las corrosiones, al menos las que nosotros hemos observado, son de interior a exterior. lo queramos asumir o no, si la corrosión se produce en el interior la causa es de un soporte inadecuado.  Esto no debería  suceder cuando multitud de instaladores han seguido a pies juntos las recomendaciones de vendedores directos de fafricantes, los que auguraban que con unas láminas no se iniciaría la corrosión. Claro que sí, intermediando una lámina magistral entre tableros y chapa no habría problemas, pero el resultado es exageradamente distinto y eso se ve. ¿Cual es pues la causa? Y por otro lado ¿cabe solución a estos problemas?. La causa podría ser ya sobradamente conocida, soluciones desgraciadamente no las encontramos en todos los casos que se nos presentan, la mayoría de las veces llegamos demasiado tarde y no podemos recomendar más allá de lo que menos nos gusta hacer que es desmontar la cubierta.  

Nota: todos los artículos y publicaciones que se hacen en la Página Web de Cumalsa, S.l. proceden de sus propias investigaciones tanto de campo como de informaciones recopiladas de diferentes textos asociados con la materia. Por lo que están amparadas por derechos de autor.  Se prohíbe  el copiado o la difusión por otro cualquier medio sin permiso por escrito del autor.

Manuel Álvarez.

ESTUDIOS SOBRE EL EMPLEO DE ZINC EN CUBIERTAS

EMPLEO DEL ZINC EN CUBIERTAS. .

(1ª parte)

Desde hace unos 35 años el zinc  se  viene imponiendo en las cubiertas,  ha pasado de utilizarse como complemento de otros materiales a ser el principal. Cubiertas de pizarra o teja por ejemplo se remataban con piezas de zinc, canalones, bajantes, ornamentos y alguna que otra cúpula se hacía  con planchas de zinc de aquellos sellos 10,12 y 14 de “Asturiana de Zinc”. Lejos quedan ya aquellos viejos hojalateros que mimaban el zinc.
pocas veces se ve que un material secundario, complementario,  desplace al principal. Sin duda que todo obedece a campañas de marketing estrategicamente diseñadas orientadas tanto a facultativos como a la captación de instaladores, y a quedarse dormidos en los laureles fabricantes de otros materiales ejemplo pizarreros.
Hay que reconocer que el zinc se puede adaptar a cualquier superficie que a un diseñador se le pueda ocurrir y eso da mucho juego. Por otra parte su instalación es relativamente sencilla una vez se adquieren las herramientas necesarias, a la vez se hacen necesarios una serie de complementos  que ayudan a adquirir  importantes beneficios.
En España no gozamos de cultura en la instalación de zinc, lo poco que se sabe se ha aprendido   con unas pocas horas de charla que daban  quienes vendían el zinc, charlas más bien   orientadas a endiosar hacia el logro de unos buenos beneficios y un trabajo asegurado. Con un poco de suerte se podía asistir a alguna clase en la que se veía como un instalador extranjero contratado por la casa, utilizaba las herramientas que había que comprar para hacer algunos remates singulares, de tal suerte que se compraban las herramientas pero la destreza se la llevaba el instalador. es como ir un día o dos a música, comprarse un saxo y pretender articular melodías, si, tocar se toca o se hace ruido.  Pensaban que teniendo la herramienta ya estaba todo hecho.
El que subscribe está muy al tanto de la trayectoria que ha ido marcando el zinc desde hace unos 40 años, de cómo ha ido evolucionando su empleo, también está al tanto de como se ha ido promocionando. He asistido a esas clases magistrales, he visitado fábricas (solo en una fábrica me pude ilustrar un poco, Asturiana de laminados), en las demás era visita turística de la que uno salía más que endiosado idiotizado, y creo que era  para poner en orden las entendederas  te   invitaban a una cena y a una carrera de scalextric, o adquirías una dosis de cerveza y máster terminado.
Curiosamente nunca he escuchado sobre adversidades que pudiese mostrar el zinc, si prevenían  de que no debía haber chimeneas de combustión de gasóleo sobre la cubierta, almacenar el zinc en sitio seco, que no le alcanzase polvo de elementos de construcción tales como cal, yeso, cemento o similares y lo principal la lámina, la lámina por encima de todo y los lagrimeros “ventilados” (lagrimeros son unas piezas que se ponen en los arranques de faldones) las cumbreras “ventiladas” laterales y toda una serie de complementos que la propia casa vendía y que cuestan una pasta. Jamás he escuchado a los aleccionadores de aquí,   decir  que el zinc se corroía  o se podía corroer .
Pero en la actualidad ¿cual es verdadero resultado de muchas cubiertas de zinc? Cubiertas que se han instalado a dictado, siguiendo escrupulosamente las directrices y es que había que seguirlas ya que de lo contrario no te recomendaban. Pues bien, muchas cubiertas están en estado ruinoso.
Un apunte; nos decían que no podía haber chimeneas de combustión de gasóleo sobre la cubierta  , la imagen muestra una cubierta sobre la que esta una chimenea desprendiendo gases desde hace 25 años y el zinc está ahí,

Otro apunte; la imagen siguiente muestra una de las muchas cubiertas hechas a dictado y que hubo que cambiar a los pocos años.

Son muchas las cubiertas de zinc repartidas por nuestra geografía que están en estado lamentable. lo decimos con absoluta certeza ya que tenemos la oportunidad de de verlas. Lo curioso es que nadie se preocupe por analizar cual es el origen de esas patologías que llevan el zinc a la ruina , y más curioso es que se sigan realizando instalaciones siguiendo la misma metodología que se ve que no funciona. Cuando se conocen cubiertas  muy longevas que perduran. ¿porque no se analizan  rigurosamente por parte de los fabricantes esas patologías tan extendidas? Nosotros si venimos realizando nuestros estudios por un interés simplemente científico y vamos llenando folios de datos muy interesantes., gracias a haber    adquirido esa confianza de que se nos confíe auditar  muchas cubiertas por toda nuestra geografía. Podemos aseverar que aunque los resultados visibles son muchas veces idénticos, los orígenes son muy distintos en cada caso. La corrosión definida como la transformación  de un metal  debido a reacciones químicas o electroquímicas con el medio que le rodea, lo cual produce un deterioro de un metal y sus propiedades, en el zinc puede tener un amplio abanico de orígenes, cada cual requiere de un estudio riguroso. Conociendo el origen de las patologías bien se podrían evitar.
La conclusión es que una cubierta de zinc puede ofrecer una larga vida útil si se realiza adecuadamente.

Manuel Álvarez

 

Corrosión del zinc

CORROSIÓN DEL ZINC.

Por Manuel Álvarez.

Como es conocido, la corrosión es un fenómeno que ocurre en la interfase metal/medio agresivo generalmente de naturaleza electroquímica que  conduce a la degradación de los metales , iniciándose en la superficie, avanzando a partir de esta y conduciéndola hasta la destrucción total de los materiales sin ninguna medida de protección fue tomada en el momento debido. 

Se entiende por corrosión, la destrucción de los cuerpos metálicos por acciones de agentes externos, persista o no su forma.

Una de las principales causas de ruina de  la cubierta de zinc es la corrosión de la chapa.

chapa de zinc corroída

  El material, tanto el de acabado natural como el pre-patinado se presentan en el mercado con las máximas garantías. Por tanto, en principio, si sufre alteraciones son consecuencia de factores externos que han de tenerse en cuenta previa a la instalación y durante la misma.   

El zinc, instalado en sitio adecuado y de forma optima no tendría por que dar absolutamente ningún problema Se pueden ver cubiertas  con muchos años al igual que ornamentos que siguen cumpliendo su cometido, de modo que  habrá que analizar el porqué de algunas alteraciones en cortos periodos de tiempo. Algún conocido fabricante en sus recomendaciones iniciales incluía:  “Consecuencias de la mala comercialización o instalaciones provocan alteraciones importantes en el conjunto de las obras. Debido  la naturaleza química del producto, las malas condiciones de almacenamiento o transporte pueden causar alteraciones importantes en las acabadas. Las posibilidades de transformación obligatorias requieren de equipos, consejos y experiencias precisas”  

Quiero Precisar que los  algunos  fabricantes poco se ha preocupado de que  sus recomendaciones se tuviesen en cuenta,   de lo contrario posiblemente no estaríamos asistiendo a tantas  cubiertas en estado ruinoso, que precisamente se hicieron siguiendo   recomendaciones de representantes de esos mismos fabricantes. Por si no se entiende el párrafo: Se daban unas recomendaciones muy severas para el almacenamiento, por el contrario en  la instalación , todo se resolvía (y aún se sigue resolviendo)  con una lámina especial, variopintos accesorios etc, etc, eso sí, con sello de la casa es decir “homologados” y adornados con unos precios supra . Y si no se hacía así, es decir, gastándose un pastizal, la cubierta no tenía garantías. ¿Y ahora que?;  cubiertas que realizadas así, con todas las majestuosidades, se vea que el zinc se descompone, se corroe, que hay que retirarlo ¿Cual es la respuesta? Pues muy simple, que se hizo mal, que se planifico mal,  lo que se vendía como inmejorable solo obedecía a intereses económicos. ¿Y si tenemos que retirar la cubierta la volvemos a realizar igual, o buscamos otro sistema? No estaría de menos que quienes a más le interesa la venta,  esos que van sacando novedades cada vez más novedosas  primero nos ilustrasen de como puede llegar el zinc al extremo de ser inservible, de pudrirse para luego darnos el consejo  de como hacer una nueva  instalación con garantías. Porque si la volvemos a realizar igual,el resultado ya lo conocemos. Claro, como hay que cambiar el sistema, eso supone reconocer que el anterior no era el indicado que sin embargo se vendió como el mejor.  Reconocer  supondría hacerse cargo y por eso es mejor dejar  que cada cual se las arregle como pueda. 

  A primera vista, uno de los fenómenos que más pudieran  agredir al zinc son los atmosféricos, pero no por ello hemos de pasar por alto  otros que pueden resultar más agresivos y que también los manejamos para su instalación,  tales como los complementos que se hacen necesarios para la optima instalación de la hoja de zinc. De hecho, la mayoría de las cubiertas que manifiestas patologías graves, ellas vienen producidas desde el interior. Es decir, se generan en la cámara oculta, esa cámara que tan de cabeza trae a los alquimistas que se han hocicado en resolver el problema recomendando sus láminas de separación, incluso imprimando el zinc por su cara interior, todo al objeto de que no le ataquen los fenómenos que en esa cámara se producen. Lo cierto es que algo sí se va logrando y es más que nada dar opciones para otros pocos años y todo basándose en los ensayos de laboratorio. ¿tan difícil es reconocer  como trabajaban aquellos que pudieron ser nuestros maestros, es decir, que instalando la chapa sobre un simple soporte compatible consiguieron que aún podamos disfrutar de la belleza de muchas cubiertas centenarias? . ¿ Que está ocurriendo para que en la actualidad la mayoría de las cubiertas de zinc estén dando problemas principalmente de corrosiones ? Preciso que la mayoría de las corrosiones tienen su origen en la cara interior de la chapa de zinc, entendiendo esta como la cara oculta que es la que más protegida está, pues ella no se siente atacada por los meteoros ni por otro fenómenos agresivos que se dan a la intemperie. 

La corrosión puede manifestarse de interior a exterior o a viceversa, lo que significa que puede provenir de orígenes  totalmente distintos.  La atmósfera esta mucho más contaminada en nuestra época actual que hace 50 años, contra esto poco podemos hacer, pero a sabiendas del riesgo se deberían de tomar debidas precauciones. Sabemos que el zinc se comercializa en diferentes grosores, para cubierta se pueden considerar desde 0,65 mm. a 0,8 mm.   Conociendo las propiedades naturales del metal, podemos concluir en que la chapa por sí sola no terminaría siendo muy longeva, pero sí tiene esa particularidad el zinc  es la de auto-protegerse. En contacto con el aire seco el zinc se conserva  a temperatura ordinaria. En el aire húmedo se cubre de una película gris, que preserva las capas inferiores de ulterior oxidación. Esta película está formada por una capa de hidróxido y metal; al cabo de algún tiempo toma color blanquecino por la acción del ácido carbónico, formándose carbonato bárico hidratado. Este se adhiere bien, pero es soluble al agua que contenga anhídrido  carbónico y amoniaco.  La oxidación del zinc es tanto mayor cuanta más grosera es su estructura cristalina. Como  producto secundario se forma peróxido de hidrógeno. El aire en movimiento oxida más el zinc que el aire en reposo. Según la proporción de gas carbónico que contenga, el aire húmedo actúa con distinta intensidad, la acción es más enérgica en presencia de gas sulfuroso.

El hierro que queda al descubierto puede ser causa de que se acelere la destrucción de una cubierta de zinc.

Si tenemos en cuenta que la capa de protección  se crea desde el propio metal en su superficie, es fácil despejar que la chapa pierde grosor de metal virgen y  por tanto densidad y resistencia. Si la atmósfera es agresiva (dependiendo de la zona en que esté situada la cubierta) y habida cuenta de que las tolerancias permitidas en los grosores pueden irse a la baja,  se debería de emplear un zinc más grueso dentro de la escala. Por otra parte, sería muy conveniente el dar pendientes pronunciadas a los faldones, de esta manera la cubierta de va a auto-limpiar, la fuerza del agua de lluvia va a arrastrar en su recorrido los depósitos sólidos que pueda haber almacenados sobre la chapa.

 En algunas  situaciones tienen alta importancia  fenómenos tales como la descomposición de los vegetales. El leñoso o celulosa que componen casi toda la sustancia sólida de las plantas, se descompone en el aire húmedo absorbiendo oxigeno , desprendiendo un volumen de ácido carbónico igual al del oxigeno absorbido , dejando sobre las cubiertas una materia llamada mantillo, compuesta de mucho carbono y poco oxigeno e hidrógeno . Esta descomposición es lenta y se verifica en el oxigeno del aire, el hidrógeno de la sustancia vegetal se une con el oxigeno del aire para formar agua y un cantidad proporcional de oxigeno de aquella se desprende combinada con el carbono , debiendo quedar entonces un exceso de este último.  

Tanto más escasa sea la pendiente. más posibilidades  hay  que se vayan creando depósitos sólidos que pueden contener esas sustancias  agresivas, por otra parte son altamente higroscópicos  y puede activar la corrosión del metal.  Tal efecto destructor, que sobre las superficies metálicas opera el moho u orín producido por la humedad y el ácido carbónico contenido en el agua, en contacto con el zinc

corrosión entre dos chapas despues de una reparación.

La oxidación de los metales, principio y agente de su corrosión, es tanto más activa cuanto mayor es el grado higrométrico y más elevada la temperatura., y se acelera rápidamente por acciones galvánicas que consumen rápidamente el metal. Tales causas son las principales que se han de procurar  evitar o contrarrestar. La acción galvánica no solamente se  produce entre metales distintos: partes distintas de un mismo trozo de metal pueden estar suficientemente separadas en la serie electro-motriz, debido a diferencia de densidad.  

Ante la imposibilidad de proyectar   fuertes pendientes, se debería de acudir a una chapa de más grosor y  no estaría de menos el hacer limpiezas periódicas de la cubierta durante los primeros años de vida ya que pueden acumularse residuos sólidos, ellos pueden contener elementos que lleguen a combinar negativamente con la chapa de zinc. Por otra parte, empleando chapa de más grosor, sera mayor el espesor una vez creada la pátina pátina. la pátina es la que definitivamente va a proteger la chapa. 

Otro factor importante a tener en cuenta es la proximidad de chimeneas de calefacción u otras  que emanen gases de combustión  de gasóleo, o industrias cercanas que puedan emitir gases contaminantes para el zinc. Se ha alertado mucho a cerca de las chimeneas instaladas sobre las cubiertas de zinc, sin embargo  no esta totalmente demostrado que todos los gases de combustión agredan al zinc ya que nos hemos encontrado en situaciones en las que residuos de gases terminan depositándose sobre la chapa creando ellos mismos una capa de protección.
En la imagen podemos ver chapa de zinc cubierta totalmente cubierta de oxido a consecuencia del gas de combustión de gasóleo que desprende una chimenea situada en la cubierta. la chapa esta funcionando perfectamente después de 19 años. Viendo esto se puede concluir que no siempre el zinc es atacado por los gases como se viene afirmando categóricamente. 

 


  (VER IMÁGENES)

 Nota: todos nuestros artículos e  imágenes tienen derechos de autor y no podrán ser utilizadas para ningún fin salvo autorización escrita de CUMALSA,S.L.

REPARACIÓN DE CUBIERTAS DE ZINC


¿Cuál es la causa que obliga a las reparaciones en cubiertas de zinc?

Penoso es contemplar  el comportamiento de muchas cubiertas de chapa de zinc que con muy pocos años presentan un estado ruinoso. 

la chapa de zinc necesita de ulteriores transformaciones superficiales para rendir exitosa en el tiempo. la teoría confirma que,  no siendo acosado por la agresividad de materiales adyacentes el zinc  ofrece sus máximas prestaciones de funcionalidad y estética a lo largo de los años. Desafortunadamente la realidad difiere rebosante de la teoría.
Concebimos el ZINC como  duradero, optimo para su empleo en cubiertas ,que además da un aspecto singular    a cualquier edificación. Por otra parte,  hay una variada oferta de acabados, que se amoldan a las necesidades estéticas más exigentes imaginables para cualquier facultativo de la construcción que quiera dar una nota añadida de singularidad a sus obras. ¿ pero que está ocurriendo?.

Con el paso del tiempo estamos  asistiendo a ritmos cada vez más agigantados a la vista de cubiertas que están dando serios problemas de agrietamientos,corrosiones u otros que las terminan haciendo inservibles.  En Cumalsa,  hemos tomado en serio  estos fenómenos, sabemos que no hay información científica al respecto. Por eso hemos apostado por la investigación  ya que  tenemos las más magníficas oportunidades, que son la de poder  estudiar multitud de cubiertas, en diferentes puntos,  utilizando como laboratorio el paso de los años, de hacer nuestros propios ensayos e ir llegando a conclusiones  ineditas.  Imprescindible es  analizar  en profundidad para averiguar las principales causas y así poder  prevenir o configurar soluciones  eficaces. Lamentablemente muchas veces se llega tarde y la solución conlleva únicamente al desmontaje integral de la cubierta y su soporte.

Así comienza la corrosión en la chapa, puntitos blancos dispersos que pasan desapercibidos y en realidad son perforaciones.

No acertamos a entender como nadie se atreve a hablar del nefasto resultado que están dando una inmensidad de cubiertas, como los fabricantes no informan sobre las adversidades en las que puede entrar la chapa de zinc si no se tienen en cuenta una serie de medidas. Es curioso ver como si compramos una simple herramienta es acompañada de un amplio prospecto que nos da una serie de directrices para sacarle su máximo rendimiento. Pues bien, compramos zinc y lo único que trae es el embalaje, una pegatina y resaltado el nombre del fabricante, eso sí,  nos dicen es que va a ser eterno. El caso es que abundan en demasía que cubiertas  se han ido realizando siguiendo las pautas marcadas por “técnicos” incluso fabricantes e “instaladores” que presumen de llevar en sus  alforjas años  en el montaje o en el sector terminan con patéticos resultados  y la necesidad de reparaciones abundan.
Es complicado  de entender como el fenómeno de la corrosión, en muchos de sus sentidos científicos, es la principal causante de la ruina de la chapa hasta límites insospechados, es decir: la destrucción integra del metal. No nos referimos a casos puntuales o aislados, no, se da la fatídica circunstancia de que abundan  repartidos por cubiertas de toda nuestra  geografía.

Los puntitos de la imagen anterior terminan con este resultado.

Con frecuencia venimos informando, dando datos veraces, razonando  como una de las causas más evidentes que provocan  corrosión en la chapa de zinc es la incompatibilidad del zinc   mayormente con los soportes. Sin embargo seguimos viendo como se continúan realizando cubiertas con el mismo criterio de instalación que las  que están en estado ruinoso. Es difícil de entender que  a la vista de corrosiones se llegue a cambiar una chapa utilizando el mismo soporte, o peor: poner una chapa nueva sobre la destruida. Esto nos puede llevar a pensar que la desconfianza se centra en el mal resultado de la chapa, por eso; cambiándola queda todo resuelto. Pero no, no es así, ya que al cabo de poco tiempo el desastre generalmente no solo reaparece, también se extiende.

El ZINC: hemos hablado hasta la saciedad de que el zinc  está perfectamente concebido para su utilización en cubiertas y así lo demuestran infinidad de obras realizadas por todo el mundo. Son conocidas cubiertas  de zinc muy longevas y sin acusar más problemas extraordinarios que los típicos de cualquier techo. Quizá que por falta de mantenimiento en algunas cubiertas  haya engroses de elementos sólidos sobre la chapa  o en los canalones, o algún ínfimo fallo en remates complicados.Tenemos que diferenciar esos resultados negativos provenientes de causas  típicas de otros más preocupantes como pueden ser las roturas, soldaduras reventadas o  corrosiones, siendo estas últimas las más extendidas. Tanto unas como otras derivan generalmente de instalaciones deficientes. las roturas se producen principalmente  a causa de tensiones en la chapas consecuencia de obstáculos en la movilidad, las soldaduras se rompen por estar mal realizadas o por utilizar estaño de aleación pobre en estaño, las corrosiones se producen a consecuencia de elementos que interaccionan con la chapa. Todo esto se podría evitar planificando adecuadamente la instalación. 

Es inconcebible ver  como en nuestra actualidad alguien se atreva a resolver reparaciones en cubiertas de zinc sin tener

corrosiones por tensión reparadas con estaño pero sin efectividad

 ni pajolera idea utilizando    siliconas , masillas, láminas asfálticas , pinturas de caucho, espumas de poliuretano u otros artilugios caseros o industriales.  No hay ninguna duda de que eso no funciona en el tiempo.
Para acometer cualquier tipo de reparación primero debe analizar el origen del desarreglo, y así buscar la solución más eficaz siempre pensando en utilizar materiales nuevos,  si es preciso amputar en amplitud las zonas dañadas para realizarlas de nuevo.  

(Vista de diferentes reparaciones , corrosiones en la chapa y catas)

Vemos con frecuencia canalones unidos con elementos sintéticos al igual que juntas de dilatación resueltas con materiales de caucho o neopreno, estos, por cierto, exageradamente caros, por lo que vamos viendo tienen una vida muy limitada.

Junta de dilatación resquebrajada

Aunque también nos encontramos con soldaduras de estaño resquebrajadas. En el primer caso, ya sabemos que las soluciones con elementos sintéticos no son las optimas ni van acordes con la durabilidad de la chapa de zinc. En el segundo , si  el estaño se resquebraja  es causa de déficit en la aplicación o aleaciones pobres.( se requiere de exquisita sensibilidad y oficio para trabajar el estañado) 
Cuando se acomete la reparación de esos elementos que no funcionan hay que recurrir a tratarlos como si fuese de origen, es decir, eliminar  lo  que esta mal, sanear las zonas afectadas y empezar de nuevo con plegados o estañados  cueste lo que cueste, lo que nunca se debe hacer es parchear sobre lo hecho, pues así lo único que se consigue  es agravar el acuciante problema. Ponemos  el  ejemplo al que se refieren las imágenes anteriores. Si en un canalón no funcionan las juntas selladas, eliminamos los sellados , limpiamos y soldamos debidamente, así tendremos el problema resuelto. No se debe acudir a otros elementos y claro que sí se puede estañar, de no poder hacerlo se sustituye la parte afectada y se hacen de nuevo. Lo mismo ocurre con los agrietamientos en las chapas, Hartos estamos de ver como se cubren con telas o pinturas,  estamos en total desacuerdo con estos materiales para su empleo en este tipo de reparaciones,  sirven para lo que sirvan, no para solucionar definitivamente problemas aplicándolos sobre la superficie de la chapa de zinc. 

Mención muy distinta merecen las corrosiones de la chapa, este asunto nos trae de cabeza. Manifestándose las corrosiones de igual forma en diferentes situaciones, no podemos parangonar unas con otras ni deducir que se originan por los mismos mecanismos. Cada caso merece de un estudio totalmente diferente, El resultado final puede ser corrosiones idénticas pero de procedencias impensables. Nos encontramos muchas veces en tener que hacer complicados estudios, lucubraciones y ensayos para llegar a comprender el origen de algunas corrosiones identicas a otras que ya tenemos definidas.  Para comprender esto delas corrosiones;  se trata de que la chapa de zinc se va descomponiendo en periodos de tiempo excesivamente cortos. No vemos que nadie  se atreva a hablar de este fenómeno tan frecuente, ruinoso  y cada vez más visible. Asistimos  en diferentes puntos de nuestra geografía a ya muchas  cubiertas que acusan este fenómeno, pero el mutismo es total.

La corrosión  es la  causa principal de ruina de un desproporcionado número de  cubiertas de chapa de zinc. Ya lo hemos comentado al principio, la chapa de zinc no debería dar ni el más mínimo problema, eso sí, trabajándola en unas condiciones determinadas, con conocimiento y dotándola de un soporte compatible.

Cuando ocurre ese  fenómeno de las corrosiones , ya demasiado extendido, nadie se pone de acuerdo en cual es la causa, eso sí, se dan  opiniones al gusto.  Pero ya se ha dicho que hay causa , claro que la hay y a quien más se culpa es a los   fenómenos atmosféricos o la polución ambiental tan socorridos a la hora de emitir un diagnóstico, siendo ellos  los menos incidentes según nuestros estudios . Lo llamativo es que la mayoría de las corrosiones, al menos las que nosotros vamos  viendo , son de interior a exterior, es decir, la contaminación procede de la cámara oculta esa que algunos dan en llamarle de ventilación, otros hasta se atreven a decir que con esa cámara el zinc está más fresquito.    Entendemos que algo se le ha ido de la mano a alguien a la hora de aconsejar, a la hora de asesorar .  El fenómeno de las corrosiones,  aunque se sigue investigando,    ya está medianamente estudiado y hay mucha información al alcance, lo que ocurre es que puede en nuestra sociedad puede más el negocio que la calidad. Muchas veces, el hacer las cosas diferentes a lo cotidiano suponen ser más económicas y claro, eso no interesas . Multitud de instaladores han seguido y siguen a  pies juntos las recomendaciones de “expertos” que todo lo basan en una cámara de ventilación sin saber llamarla cámara de aire.  Auguran que  una cámara de ventilación lograda a base de láminas magistrales es   como la taxidermia  para la chapa. bueno, también hay que añadir los  accesorios homologados del propio fabricante etc, etc.  con ello, ala, cubierta para toda la vida. Utilizando otros términos, muchas no llegan a la primera comunión que antes se hacía a los 7 años  y nadie se atreve a   hablar de la enfermedad que las  va mutilando. Claro que sí, intermediando una lámina magistral entre tableros, incluso mortero  y chapa, utilizando las patillas  (grapas) de marca u otros accesorios siempre de la marca, no tendría  que haber  problemas. Pero el resultado, en demasiados casos,  es exageradamente distinto y eso se ve. Lo más lamentable es  ver la impotencia de los sufridores que no encuentran sosiego a la hora de pedir información.

¿Cual es pues la causa? Y por otro lado ¿ cabe solución a estos problemas? Las causas, en su mayoría  son conocidas, las soluciones lamentablemente son bastante complicadas,  acudiendo a tiempo cabe poder  conseguir reparaciones eficaces.

Cumalsa. S.L

PANELES SOLARES SOBRE CUBIERTAS DE ZINC

 

SE PUEDEN INSTALAR PANELES SOBRE LAS CUBIERTAS CON PLENAS GARANTÍAS

Es lo más frecuente, que la cubierta del edificio sea la plataforma de descanso de los paneles o placas  solares.  Por  muchos motivos que no vienen al caso, no dejan de ser las cubiertas las ubicaciones más apropiadas para  los dichos generadores de energía,  así vemos innumerables edificaciones con sus cubiertas adornadas por multitud de paneles  instalados  sobre ellas.
No es el cometido de este articulo hablar de las prestaciones de los paneles,  sino informar de lo que puede suceder o sucede   en una cubierta de zinc si la instalación de los paneles  no se proyecta adecuadamente,  o si no se tienen en cuenta una serie de factores esenciales que se dirán.
Deberíamos tener en cuenta  que la cubierta, sea del material que sea,  es unas de las partes más importantes de un edificio . Ella es la que cobija , por eso ha de estar en permanente estado de servicio. En este caso vamos a hablar de instalación de paneles sobre cubiertas de zinc, que también podríamos incluir el material cobre, pero siendo las calidades y comportamiento de los metales tan diferentes, el cobre no requiere de las mismas precauciones aunque si hay que tener en cuenta algunos factores como son las fijaciones. Podríamos decir que el cobre puede repercutir negativamente en la estructura de los paneles o en los propios paneles, al contrario de lo que pasa en la cubierta de zinc, que es la chapa de zinc la que sufre las peores consecuencias.
La chapa de zinc, tan utilizada en cubiertas,  es un metal duradero pero  que exige de una cuidadosa planificación para su instalación si de él queremos lograr su máxima vida útil. La instalación de paneles sobre la chapa de zinc es cada vez más frecuente y no deja de ser preocupante .  los resultados ya se están viendo
Desde hace unos años 25 años  venimos estudiando el comportamiento de algunas cubiertas de zinc sobre las que se han puesto paneles solares.

Cubierta de zinc que supera los 25 años, resuelta sobre entablado de madera

 .

A la vez  hacemos diversos ensayos sobre diferentes plataformas de soportes para el apoyo estructural  de paneles. El tiempo de estudio nos va dando el fruto de obtener datos veraces, fiables de comportamientos muy diferentes.
Podemos hablar de cubiertas que permanecen inalteradas y otras totalmente arruinadas.
Las seguidas observaciones, los minuciosos y engorrosos estudios nos permiten articular rigurosamente  ciertas conclusiones.

No es fácil dictaminar con aserto el porqué una cubierta de zinc con paneles sobre ella termina corroída e inservible deduciendo que la consecuencia viene de los paneles, cuando comparamos con otra que también los tiene y no presente los mismos agravios.

Que unas con menos de 10 años estén totalmente arruinadas y otras con 20 sigan intactas. Un ejemplo: Dos piscinas climatizadas (públicas que sobrepasan los 2.000m/2 de cubierta) situadas en diferentes zonas geográficas, las dos con estructura de madera similar, si bien en una la chapa esta puesta sobre entablado y la otra sobre tablero y lámina, (tiene que ver para otras patologías)  las dos ensombrecidas por placas solares. la más longeva permanece normal y la otra comenzó a alterarse al poco tiempo de su instalación estando a la fecha totalmente inservible hasta el punto de correr riesgo la estructura. Hay que destacar que las fijaciones de los  soportes estructurales de los paneles son totalmente diferentes. (la conclusión es que el soporte de los paneles contribuyo a la ruina de la cubierta)

Cubierta de zinc totalmente inservible
Cubierta de zinc inservible, no supera los 15 años
los soportes de paneles verdaderos causantes de la ruina de la chapa de zinc
A la destrucción de esta cubierta, además de los soportes de los paneles han ayudado otros elementos.

las imágenes anteriores  muestran claramente la cubierta de zinc totalmente inservible, a la que se le han hecho multitud de reparaciones, hasta el punto de que se llego a cubrir toda la superficie de la chapa en varias sesiones con telas, poliester, fibra de vidrio, pinturas de caucho sin ninguna posibilidad de éxito.

Podríamos citar otros muchos casos como ejemplo  que avalan  que los paneles pueden provocar corrosiones irreparables o roturas   igualmente irreparables. Dos simples paneles pueden ser suficientes , en principio, para terminar arruinando una cubierta.

la imagen siguiente nos da buena cuenta de cómo se deja descansar la estructura de los paneles sobre la cubierta de zinc sin ningún escrúpulo que es lo que sucede la mayoría de las veces. Conste que los paneles son instalados por personas que dicen ser técnicos, formación que no se les cuestiona, pero en lo que se refiere al conocimiento del comportamiento de los materiales y  respeto a  lo que ya está hecho, dejan muchas dudas.

Paneles sobre cubierta de zinc. la chapa se encuentra corroída en su mayoría

 

¿Se pueden consentir  que unos técnicos lleguen a la cubierta de zinc con unos hierros y un taladro, hagan unos agujeros, taladren,  atornillen directamente sobre la chapa, sellen los agujeros con masilla, pongan los sofisticados paneles y certifiquen que quedan bien instalados?. Sencillamente no. Lo peor llega cuando aparecen humedades, el agraviado, restando importancia  suele llamar a cualquiera de esos arreglalotodo, unos apósitos y ya está, pero el problema sigue y es cuando se  empieza a tomar en serio y se busca a un especialista que es el que termina desengañando.

¿Se puede consentir que los mismos que promocionan el zinc y venden grapas móviles para la fijación de las chapas ya que ellas están expuestas de por vida a movimientos de dilatación y contracción, aconsejen fijar las estructuras de los paneles a las uniones de las chapas mediante piezas fabricadas a propósito ?.
Vamos a ver; las uniones de las chapas son las zonas que en principio más absorben los movimientos y debido a ello se ponen esas grapas que llamamos “móviles”.  No hay que entender de física, solo hace falta el sentido común que se nos presume a todos, para entender que amordazadas las chapas se le impide el movimiento y si no se pueden mover y tienen que moverse pues terminaran rompiendo. Técnicamente llamamos a los fenómenos que se producen roturas , corrosiones bajo tensión. Pero aún los hay más osados, los que recomiendan poner bloques pesados sobre la chapa y a ellos entregar las estructuras de soporte para los paneles. Ateniéndose a la explicación anterior, estamos en la misma situación. En los tiempos que corren, ante tanta modernidad e innovaciones de las que presumimos, fallamos en lo más básico.   

Se pueden poner paneles sobre cubiertas de zinc con plenas garantías en lo que a los soportes se refiere. Hemos estudiado soportes  independientes que permiten anclar los paneles sin ningún riesgo para la cubierta, aunque tenemos en el punto de mira ciertos materiales necesarios que llevan los paneles, tales elementos pueden llegar a alterar la chapa de zinc

 

Nuestros estudios nos van dando datos, sin descartar más elementos, de momento hemos estudiado el comportamiento  de  las tuberías conductoras exteriores que  suelen ser de cobre, estas suelen aislarse, no totalmente, con material de bastante espesor y relativamente permeable. El que las tuberías sean de cobre, que el material aislante sea permeable y de grosor suficiente para absorber cierta cantidad de agua y retenerla, nos da información suficiente para desgranar el porqué se corroe la chapa que circunda los paneles.

Antes de instalar paneles sobre la cubierta de zinc es conveniente pedir información, contrastarla y actuar con absoluta seguridad ya que soluciones si las hay.  

Manuel Álvarez.