REPARACIÓN DE CUBIERTAS DE COBRE

En Cumalsa, s.l, trabajamos con los materiales de cobre, plomo, zinc  y pizarra . De Todos ellos es sobradamente conocido su resultado en  cubiertas de edificaciones.

Si tuviésemos que mantener un orden por su durabilidad, según nuestras propias investigaciones, situaríamos como más longevo el cobre, siguiendo el orden mencionado al principio. No cabe en este artículo hablar de las excelencias del material, que si las tiene. Corresponde hablar de porqué a pesar de ser un metal al que se le presume una durabilidad extraordinaria,  en no pocas ocasiones exige de importantes reparaciones, superándole los demás en resultado efectivo en el tiempo.

En comparación con los otros metales con los que trabajamos, nunca hemos llegado a ver una chapa de cobre corroída en una cubierta hasta el punto de estar perforada. Hemos hablado mucho de las corrosiones que por diversos motivos sufren los metales. En el caso del cobre, si vemos corrosiones, pero en ningún caso  hemos llegado a ver la chapa destruida o inservible. Para apoyar más la insistencia de que el cobre es duradero, hemos comprobado cubriciones de cientos de años y están perfectamente servibles, es más, son la mayoría de extraordinaria dificultad de ejecución, sin embargo, no solo permanecen incorruptas sino que ofrecen una peculiar belleza.

¿Cuál es entonces la causa o causas que obligan a tener que hacer reparaciones en las cubiertas de cobre?. Nuestra respuesta es muy sencilla, una precaria instalación. Es así.


De lo anterior dicho, cualquier profano puede concluir, que si el cobre no ofrece absolutamente ninguna duda para su empleo, si a priori descartamos  la  corrosión de origen químico y en breve plazo permite filtraciones de  agua. ¿ qué sucede y porqué ? Insistimos, una instalación incorrecta es la causa, no cabe otra. Pero ¿qué entendemos por    incorrecto?. En este caso,  a presumir de oficio sin tener la más remota idea del ulterior comportamiento del material aplicando técnicas chapuceramente vanguardistas,  a terminar pronto y salvar el presupuesto presumiendo de oficio.  Es repugnante ver como una cubierta de considerable  precio, de calidad inigualable, necesita de reparaciones   hasta el punto de llegar a desesperar por impotencia  a quienes tienen que soportar los daños y afrontar los gastos.

No podemos descartar que en una instalación, por cualquier motivo, ocurra algún desajuste que termine dando algún susto, eso sería pasajero. Lo grave es cuando los desajustes se suceden y se reparan asistidos por la misma  similar ignorancia que cuando se realizó el trabajo.

Reparación en chimenea de cobre

Los metales están sometidos a importantes dilataciones, en el caso del cobre es buen conductor y acumulador, lo que  Sumado  a su importante coeficiente de dilatación ya tenemos suficientes datos  a tener en cuenta  en la instalación. Si sabemos de las dilataciones, no se pueden  poner obstáculos a los seguros movimientos clavando las chapas de forma incontrolada.    Cuando empleamos adyacentes para hacer efectiva la estanqueidad de la chapa en algunos encuentros, pasamos por alto las condiciones a las que van a estar sometidos estos complementos y que son desconocidos los que resisten en el mismo orden del metal.

La mayor parte de los defectos que observamos en una cubierta de cobre, derivan de roturas por fatiga o descomposición de amalgamas que se utilizan en defecto del estaño. Igualmente nos encontramos estañados corroídos, aquí también conocemos la causa  . También es muy  corriente ver roturas  por tensión.   

No podemos termina este artículo sin decir que la mayoría de cubiertas de cobre están instaladas sobre tableros, que aún llevando láminas separadoras, la humedad que se filtre va a ir a parar en algunos puntos al tablero, con la consiguiente degradación de este.

A diferencia de otros metales, el cobre, aún con muchos años admite reparaciones efectivas a base de estañados o pequeñas prótesis en aquellas zonas que lo precisen y por ser la grieta excesiva no garantice solo el estañado. Lo mismo ocurre en encuentros o quiebros. Cuando se vea una rotura, hay que averiguar la causa y repararla de raíz. Lo que nunca se debería hacer es reparar con amalgamas, telas u otros complementos. UNA CUBIERTA DE COBRE, SI SE ACUDE A TIEMPO, SE PUEDE REPARAR DE FORMA EFECTIVA Y DEFINITIVA. PARA ELLO SE REQUIERE DE UN MINUCIOSO ESTUDIO, ANALIZANDO HASTA EL EXTREMO LAS CAUSAS QUE OBLIGAN A LA INTERVENCIÓN Y ASÍ PODER  VER LA FORMA EFECTIVA DE HACER LA REPARACIÓN.

M. Álvarez

Todos nuestros artículos son redactados por nuestro personal  utilizando nuestros propias fuentes de investigación, cualquier parecido con otros similares son mera coincidencia,  Nuestras publicaciones   están protegidas por derechos de autor, no se permite ni el copiado ni la difusión completa o incompleta sin autorización por escrito del autor.

 

 

¿Alguien se lo podría imaginar?

 No es un montaje, es la más pura realidad. En una de nuestras últimas intervenciones  hemos encontrado lo que se visualiza en las imágenes. Para nosotros no fue ninguna sorpresa, puesto que unos meses antes habíamos inspeccionado la cubierta y llegamos  a la conclusión de tener que recomendar   la necesidad urgente de la retirada de toda la chapa y su soporte de tablero aglomerado hidrófugo. 

Se trata de una cubierta de sobre 1200 M/2. La alarma ya saltó hace unos años, pero no se le dio la merecida importancia y se hicieron varias reparaciones al “tun tun” algo así como “tocar de oído” que si no se entiende la música, al menos se hace ruido. El caso es que el problema fue avanzando, y los propietarios, movidos más por la desconfianza que por los conocimientos, decidieron encargar un estudio del estado de la cubierta. Demasiado tarde. El estado de degradación interior, como se puede ver, es tal que obliga a la recogida de la chapa de zinc y el soporte todo a consecuencia de este último. El tablero se presenta totalmente descompuesto, podrido, inservible. De aquello que en su día se vendió como lo más efectivo ahora nadie se hace cargo, los del que vendieron el zinc culpan al tablero. Pero si poniendo una lámina “Delta” que es lo que  vendedores  representando a fabricantes de prestigio  aún siguen  recomendando  a pies juntos y están garantizadas las cubiertas frías, calientes, cálidas y cualquiera que se ponga por delante, eso sí, tiene que llevar zinc de determinadas marcas, que con lo que dicen, por el simple hecho de estar posicionados en el mercado se hacen tan creíbles que  pretenden sentar cátedras, pero de estudios científicos veraces nada de nada. Bueno sería que al aflorar las adversidades estuviesen a la altura dando soluciones o haciendo investigaciones y no tratando de lapidarse unos a otros,  dejando a los propietarios en la más absoluta impotencia .

¿Como sucede este fenómeno al que nos referimos en este artículo, alguien lo puede explicar, alguien se lo podía imaginar? Por si hubiese alguna duda, la chapa de zinc comenzó a ser inservible a consecuencia del soporte y no al revés. Pero es que el soporte, el tablero, está todo el protegido por la majestuosa lámina “Delta” y el zinc fijado por “patillas homologadas, en principio todo correcto, pero se está yendo todo a la porra. El tablero hidrófugo se descompone a consecuencia de la humedad que  nadie entiende como siendo hidrófugo no la repele, tampoco nadie se atreve a aclarar  de donde viene esa humedad . El zinc se corroe y nadie sabe porqué. No es triste que aquello que se instaló con tanta seguridad termine abocando a unos propietarios a la impotencia, hasta el punto de que nadie les de respuesta a algo tan evidente y que al final tengan que sufragar cuantiosos gastos provocados por la inoperancia de presumidos expertos.
Afortunadamente en este caso,  la propiedad que siempre creyó, sigue creyendo en el zinc y se realizo una nueva cubierta de chapa de zinc natural, eso sí, con sistema de soporte  totalmente diferente al primitivo recomendado por los que más que expertos  juegan a, alquimistas con rudos conocimientos . En este caso se utilizo chapa de zinc  elzinc de la calidad natural y soporte de entablado de madera de pino, así, sin más .

Con frecuencia venimos hablando del comportamiento de los soportes que se utilizan para la chapa de zinc, generalmente hablamos más de alguna calidad de tableros aglomerados cubiertos por láminas separadoras. Independientemente de si la chapa de zinc, por su nomenclatura, pudiese  ser más o menos vulnerable, tenemos la certeza científica de que los tableros encontrados amén de degradarse como se ve en las imágenes, repercuten negativamente contra la chapa de zinc. Esta cubierta, como todas las que inspeccionamos, la hemos estudiado con detalle, hemos sacado datos que contribuyen a matizar reforzando nuestras tesis a cerca del comportamiento de las cubiertas de zinc y sus adyacentes.

Cuando se realizo la cubierta ¿alguien se podía llegar a imaginar tal resultado?

IMÁGENES REPRESENTATIVAS DEL RESULTADO DE ALGUNOS TABLEROS QUE SIRVEN COMO SOPORTE EN CUBIERTA DE ZINC.

(Todas las imágenes han sido realizas por   Cumalsa, s.l. y están protegidas por derechos de autor)

CORROSIONES DE LA HOJA DE ZINC EN CUBIERTAS

CORROSIÓN EN CUBIERTAS DE ZINC

Todas  las imágenes corresponden a una   misma cubierta de unos 400 m/2 aproximadamente. Realizadas en una de nuestras intervenciones de inspección . Las patologías obedecen a corrosiones que las hemos calificado como electrolíticas derivadas de elementos perfectamente identificados. El resultado final es la retirada de toda la chapa por inservible. En este caso hemos realizado un minucioso estudio para conocer detalladamente como se producen  este tipo de fenómenos en zonas concretas, avanzando posteriormente al resto de las chapas. Se trata de una cubierta instalada a tresbolillo y con junta de listón. El sistema de instalación es el menos empleado, sin embargo ofrece una mayor vistosidad a la cubierta, por otra parte es el más efectivo para la ulterior funcionalidad de la hoja de zinc.
Como venimos diciendo en nuestros numerosos artículos, de poco nos vale una magnífica instalación si no se tienen en cuenta los elementos de los que hacemos uso y pueden perjudicar gravemente la chapa de zinc como en este caso.

LAS CUBIERTAS DE ZINC EN AUGE

CRECE LA DEMANDA DEL ZINC

El zinc, desde hace muchos años de alguna forma está presente en las cubiertas de nuestra geografía, bien como elemento principal o como adyacente de los  más   tradicionales   de   teja o  pizarra.  Uno recuerda que en las cubiertas de pizarra cuando mencionábamos  forrados metálicos hablábamos de chapa de zinc, de aquella que era del nº 10, 12 o 14. Hojas de zinc de 2000×1000 mm. Todas ellas selladas, no cabía equivocación. De tales habilidades gozaban los instaladores que a simple tacto sabían de su grosor y a simple vista deducían su calidad s. Eran otros tiempos, ya historia. Esos  Complementos  fueron relegados, se quedaron en la historia, su lugar lo ocupan las famosas chapas lacadas de aluminio o incluso hierro, que como cómo su color, para estos menesteres, es negro, compagina muy bien sobretodo con la pizarra y a la vez aporta  pingües beneficios.

El caso es que la chapa de zinc, metafóricamente  hablando, se cabreo y poco a poco fue ganando enteros hasta el punto de ser uno de los materiales más demandados  para cobijar a toda clase de edificaciones. Claro que él zinc,  por si solo, no se podía sublevar y ganar prestigio entre los materiales de siempre empleados que masivamente coronaban  los edificios más emblemáticos. Podemos observar en nuestra actualidad edificios cubiertos con pizarras naturales, con tejas incluso decoradas, con plomo que evidentemente resisten los demoledores arietes atmosféricos. Echando  la vista atrás y a poco que reflexionemos, concluiremos en la impresionante nobleza y resistencia de estos materiales que junto al conjunto de otros que completan  las edificaciónes, nos permiten contemplar su belleza año tras año. Estos materiales de cobertura superan incluso en durabilidad a los otros que protegen, pues no olvidemos que ellos son “materiales de sacrificio” han de proteger a aquello que cobijan y ser testigos ellos mismos de desgaste antes de apreciarse en los demás.

Aquellas chapas de zinc ya mencionadas en este artículo han quedado en el olvido, también el uso de la chapa de zinc como adyacente o destinado a las ornamentaciones que manos artesanas trabajaban con mimo para aportar singularidad a edificaciones singulares.

la lícita “guerra comercial” nos trajo invasores, firmas extranjeras que “bombardeaban con la chapa de zinc“. Su estrategia era machaqueo a base de marketing y clases “magistrales” de un par de horas o un par de días con las que idiotizaban de tal forma que  quienes recepcionábamos aquellas parafernalias, salíamos de lo que llamaban cursillos de formación sintiéndonos poco menos que con un doctorado, contentos y doctos. Eso sí, para poner en práctica aquellos conocimientos había que llevarse el maletín de herramientas varias  que nos encasquetaban a  un buen precio. Aquello era para practicar solo, o para realizar alguna chapuza, pero el mercado iba en auge, el negocio prometía y ya venía la segunda parte,  la maquinaría, maquinaría para todo y ojo a sus precios.

Desde otra perspectiva, ya desde lo  que uno sabe en la actualidad, se puede decir que aquellas nociones eran pura parafernalia y carecían de lo más elemental, pues no se hablaba de la nomenclatura del zinc, de su resultado en el tiempo, de sus incompatibilidades, solo se mencionaba  su majestuosidad.

Todo esto mencionado surgió hace no muchos años. El caso es que en la actualidad estamos viendo multitud, demasiadas   cubiertas de zinc en estado ruinoso, es decir , inservibles, que traen de cabeza a sus propietarios, que sienten verdadera impotencia,  ya que quienes les convencieron con las maravillas, ahora  no les dan soluciones y no se reparten, no, se atribuyen unos a otros las más absurdas culpas.

Muy ingratificante resulta ver a quienes confiaron en la cubierta de zinc, quienes ilusionados eligieron el material para su edificación se sienten impotentes viendo como en pocos años su cubierta está totalmente inservible y nadie les da soluciones. ¿ En donde están aquellos que tanto promocionaron el zinc, aquellos que decían que su zinc era el mejor, que garantizaban su durabilidad  ? ¿ Por qué se alejan de la realidad, porqué  dejan indefenso al consumidor atribuyendo culpas a su antojo? ¿Por qué no nos ilustran con la realidad, pues medios y conocimientos han de tener?.

Independientemente de todo lo dicho, las cubiertas de zinc, según mis datos, son de lo más demandado para nuestras edificaciones. Nunca he entrado a cuestionar el zinc como tal. Si cuestiono muchas otros agentes.  Aunque no paso por alto el estudio de la nomenclatura del zinc laminado para cubiertas, no está muy al alcance el conocer las diferentes fases necesarias  para llegar al estado de su presentación en el comercio. la lejanía ,las dificultades, el oscurantismo, la falta de información directa, obstruían de alguna forma, para  este autor, surtirse de conocimientos sobre el metal, necesarios para terminar realizando trabajos con garantías o al menos tener controladas las adversidades que se puedan presentar.

Contamos en España con una fábrica de laminados de vanguardia,(ELZINC) afortunadamente uno puede extraer datos científicos directos, incluso intercambiar conocimientos de resultados. El intercambio de información siempre es interesante entre quienes fabrican el producto y quienes lo instalan, son estos  últimos   quienes ven el verdadero  resultado.  De esta manera, realizando cubiertas con una buena planificación y oficio,  podremos disfrutar durante muchos años de lo que ahora está en auge. LAS CUBIERTAS DE ZINC

Manuel Álvarez

INSPECCIÓN DE CUBIERTAS

Verificación de estado de cubiertas.


En cumalsa, s.l. contamos con un departamento cualificado  que se encarga de informar técnicamente del estado de cualquier cubierta de chapa de zinc, cobre, plomo o pizarra.  Informamos   basándonos en nuestros propios conocimientos investigaciones y estudios científicos, contrastados con diversa documentación asociada.

Nuestros estudios respecto al comportamiento de los metales zinc, cobre y plomo, se están teniendo  en cuenta en algunas  universidades y se utilizan en sus facultades de ingeniería mecánica.

A la vista de muchos resultados adversos que se están observando sobre todo en las cubiertas de chapa de zinc, serían  muy indicadas las inspecciones visuales prematuras, es decir, dentro de los primeros  años de vida y antes de  que expiren los periodos de garantía. En caso de observarse cualquier  anomalía o humedades, la inspección  debería ser  obligada y  exhaustiva. No olvidemos que algunos procesos de deterioro en el zinc empiezan siendo muy lentos,  casi inapreciables para terminar siendo irreparables, pudiendo terminar haciendo inservible la cubierta. Generalmente cuando la chapa de zinc presenta alguna disfuncionalidad, viene dada a consecuencia de carencias, vicios en la instalación o inadecuación de materiales empleados como complementos . En caso de observarse anomalías, han de conocerse debidamente las causas para reparar el daño de forma efectiva  si puede ser posible.
Se deben deslindar lo que son  defectos puntuales de la instalación de lo que ningún profesional está exento, de las reacciones impropias del metal. lo primero tiene solución, lo segundo es más complejo
Ante cualquier distorsión, en la mayoría de los casos,  se hacen intervenciones a modo de reparaciones sin darle demasiada importancia, sin embargo,  la cubierta sigue demandando intervenciones y así las reparaciones se suceden  cada vez con más intensidad,  hasta darse de cuenta que ya no hay remedio y ahí es donde empieza la debacle. 
No necesariamente un instalador tiene que ser experto, pero si ha de tener habilidad y destreza suficientes para realizar aquello que de su oficio  se le encargue. Por el contrario, el buen experto si que  necesariamente  debería  ser instalador o gozar de sus conocimientos, por su saber, por su ciencia,  sabe adelantarse a la mayoría de las patologías y si de ellas cabe o no su anulación.

LA CUBIERTA

La cubierta es esencial en cualquier edificación; hay una  extensa oferta de materiales que están a disposición en el mercado, pero no todos ellos vienen acompañados de un código que regule su empleo. La mayor parte de las veces nos guiamos por”profesionales” o divulgadores categóricos que juegan a asesores e informan a su antojo, a provecho de su bolsillo . No  son pocas las incógnitas que se plantean a la hora  de planificar una cubierta y mucho mayores cuando se trata de acometer una reparación.

NUESTROS ESTUDIOS

En Cumalsa, s.l. informamos y asesoramos de forma veraz, basándonos en los datos  que vamos consiguiendo  en multitud de  estudios científicos  que día tras día realizamos y contrastamos, además contamos con nuestro propio laboratorio de ensayos metalográficos , lo que nos permite estar al día en el comportamiento y evolución de los metales instalados en cubiertas. 

El empleo de un material  desconociendo  las propiedades y comportamiento del mismo en el tiempo  pueden desembocar en ulterior ruina,   que se podría evitar conociéndolo a fondo y haciéndolo acompañar de   adyacentes adecuados.

COMPORTAMIENTO   DE LOS MATERIALES EN EL TIEMPO 

Del comportamiento en el tiempo de algunos materiales de cobertura deberían informar los fabricantes o distribuidores, pero utilizan demasiado poco tiempo en informar más allá de las virtudes. Si a la postre resulta ruina,   no tienen escrúpulos en tildar   de incompetente o incurioso al instalador que en parte sigue unas directrices marcadas por quienes venden los materiales,  demostrado está que poco les debe importar el resultado. Lo que importa es vender.

Trabajamos con materiales que van a estar de perpetuo expuestos al ariete demoledor de la atmósfera , por eso  el mejor laboratorio de ensayos  es el  paso del tiempo y también quien termina definiendo   su comportamiento. Para tener un conocimiento aún no pleno y así poder informar con relativa seguridad,tienen que ir pasando  muchos años manteniendo la constancia en las investigaciones, hay que observar periódicamente  muchos trabajos para tímidamente ir viendo su  evolución positiva o negativa.

En CUMALSA, S.L. solo podemos presumir de  14 años como empresa,  pero   arrastramos   más de 40 años en este fascinante mundo de las cubiertas. Tras muchos tipos de estudios que nos van aportando pequeñas evidencias, algunas con mas contundencia que otras. Después de poder ver y realizar cubiertas en toda la geografía y en las más diferentes situaciones, ello nos va permitiendo extraer esos datos tan necesarios para  asesorar de forma veraz, con absoluto rigor y amplio  conocimiento. Las cubiertas, más las metálicas, tienen un comportamiento dinámico, suele ocurrir que lo que un día damos por sentado nos sorprende poco después con un comportamiento totalmente distinto. 

Resulta sorprendente ver como se recomiendan o se hacen ciertas algunas informaciones sin el más mínimo razonamiento científico,  las que pretenden que creamos  como ciertas por el simple adorno  de “llevamos “x” años en el sector” con imágenes de obras creídas como relevantes  u otros artilugios de marketing.   Los años por si solos nos envejecen   no nos  hacen sabios,  pero son imprescindibles para el saber , pues sin el paso de ellos no se podría saber con certeza la durabilidad de muchos materiales, no se puede decir que un material va a durar  30 años si no  se cuenta con precedentes similares.  Pero, ¿ y qué pasa cuando lo que se  presume que tenía que durar 30  no llega a los 12 a los 10, o los 6  y se sigue informando en la misma línea que cuando se recomendó ? Pese a lo que pese, no podemos dejar de decir que recibimos muchas solicitudes  demandando información sobre cubiertas que están en estado ruinoso  llevando muy pocos años realizadas. Añadimos,  en el 99% de los casos las cubiertas que visitamos están en estado agonizante que ya viene de largo, pues rara vez no nos encontramos reparaciones anteriores, reparaciones que sin duda, las que nosotros vemos, contribuyen más a grabar el problema que a resolverlo.

¿ No es vergonzoso ver como cubiertas realizadas con materiales caros, que se venden como de la máxima calidad y se realizan con los consejos algunos meros alquimistas,  al poco tiempo de estar instaladas hay que repararlas, desmontarlas o desesperadamente aguantar?  Lo más grave es que pocos o muy pocos nos atrevemos a razonar científicamente las causas,  y aún más grave aun atreverse a reparar sin el más mínimo escrúpulo, aplicando masillas, láminas asfálticas, pinturas Etc, Etc. A mínimo que pensemos, ¿ como se puede reparar definitivamente un material cuando  para la reparación se utilizan elementos que se sabe a ciencia cierta que duran  menos que el  que se está reparando, claro, de ahí viene que las  reparaciones se vayan sucediendo año tras años hasta que ya no hay remedio. 

Como venimos diciendo,  no es una cubierta, no, son muchas y repartidas por toda nuestra geografía, las que están dando problemas, ¿ Pero si se han realizado con las máximas garantías, siguiendo las recomendaciones de expertos , siguiendo nítidas prescripciones técnicas, cual es la causa que obliga a la ruina ?

Un par de apuntes gráficos. Observemos la siguiente imagen , se trata de una cubierta  de zinc, una chimenea que despide gases de combustión de gasóleo, lleva 19 años instalada y ningún problema. ¿como se explica que eso de la agresión de los agentes externos? puedo asegurar que es inaguantable mantenerse cerca de la chimenea cuando está en funcionamiento, pues el sulfuro que desprende intoxica

El siguiente ejemplo: Se nos permitió hacer una cata en una cubierta que habíamos realizado muchos  años atrás, está la chapa de zinc instalada sobre entablado de madera de pino, la humedad a la que esta sometida la madera oscila entre el 60 y el 68%, hasta el punto de haberse corroído totalmente muchos de los clavos que fijaban las tablas, la chapa de zinc esta en perfectas condiciones. Viendo esto ¿ como se explica la teoría de la necesidad “imprescindible” como mantienen algunos, de que en una cubierta de zinc es indispensable  que la chapa este ventilada por su parte interior? sí , se recomiendan láminas magistrales,  de esas mismas que algunas  para hacerlas más llamativas las identifican nombrándolas con la cuarta letra del alfabeto griego. “DELTA” ¿Como se puede aseverar que la tal lámina garantiza la ventilación interior de la chapa, aún estando ayunos de conocimientos sobre aerodinámica se puede concluir de que tal aserto es categóricamente falso. 

Chapa de zinc después de 15 años, con chimenea de combustión de gasóleo pegada

 Nunca nos hemos querido  poner en duda la calidad de los materiales empleados en cubiertas, ni tan siquiera la falta de empeño por parte de los instaladores, pero si la cubierta no funciona,  ¿ qué es lo que ocurre? podemos decir que hay un déficit manifiesto de información y un importante ayuno de oficio a la hora de trabajarlos , eso puede obedecer a intereses que a la larga terminan volviéndose en contra para todos, sobre todo para el que tiene que padecer las consecuencias directas y correr con los gastos de las reparaciones llenas de incógnitas.  

 No tengo  ningún reparo en reconocer que en  tiempos  iniciales  he dado algunas informaciones rozando lo erróneo ,  la ignorancia inicial me permitió comulgar con datos genéricos que, como a todos,  me fueron  proporcionando los intrépidos vendedores, que por la novedad y  a golpe de catálogo conquistaban hasta a los más prestigiosos prescriptores. El objetivo: que se prescribiese la marca y a poder ser también los adyacentes que las mismas firmas, intermediarias,  se encargan de comercializar. Bien es cierto, que cuando se hacen reclamaciones ante la sorpresa del comportamiento de algunos materiales, los suministradores culpan de incuria al instalador. Sí, el sufrido instalador, que si compra mucho  se le venera y promociona y si no compra es incompetente.  Es de Ley, si el material tiene comportamiento adverso, tiene que recoger  la culpa quien  lo vende, asesora sobre él y dicta adyacentes determinados, sin descartar al ignorante que haciéndose el experto comulga con lo que el hábil  vendedor le recomienda .

   Nuestro día a día, nuestra preocupación, nuestros conocimientos, también nuestra inquietud, nos ha despertado y hecho escudriñar y así podemos permitirnos el  aproximarnos a la realidad y sencillamente comprender que la mayoría de las informaciones  al uso, muchas de ellas ,  ni  son veraces , ni están contrastadas para promocionarlas como las mejores,   mas bien están orientadas  a vender que a informar. 

Es sorprendente  ver como se reparten catálogos, casi libros de muchas hojas, llenos de detalles de instalaciones que muchas veces, sencillamente son imposibles de llevar a la práctica. En ellos no se habla absolutamente nada del comportamiento adverso que puede tener el zinc, por lo contrario solo se habla de las virtudes que claro que las tiene. Claro, que si se mencionase algunas incompatibilidades el negocio no sería el mismo.

Hartos estamos de ver páginas Web  y catálogos con las más atractivas imágenes, de vídeos de cubiertas  los que se hacen apetecer hasta por sus   músicas casi celestiales. Pero a la hora de querer informarse de cual es el comportamiento físico químico o  mecánico del material en el tiempo, nada de nada,  hay  que conformarse con las generales de la “ley”, densidad, color, algunos coeficientes, llevamos años en el sector y  poco más.

 Como ejemplo: Se ha llegado a recomendar, por algunos  fabricantes, canalones de cobre, o de zinc,  unidos con elementos sintéticos garantizando su estabilidad en muchos años pasando por alto la soldadura de estaño. ¿ a alguien le puede caber en la cabeza que una  masilla pueda acompañar en durabilidad a una chapa de cobre por ejemplo. 

Mucho se lleva hablado de  que en la cubierta de zinc es imprescindible la ventilación, adornando con tímidas explicaciones a modo de papel de caramelo.  Cada cual que piense lo que quiera, pero los resultados saltan a la vista. Resulta sorprendente, cuando se va a vender todo son maravillas, en el momento que aparece algo extraño, que después de lo que se esta viendo es más común que extraño, nadie se pone de acuerdo el porqué de tales resultandos.   

Instaladores  que  siguen  manteniendo a pies juntos que algunos metales, como el zinc,  necesitan de una cámara de ventilación interior,  pero no se matiza el porqué y esto incluso lo dicen algunos empresarios de la instalación, que lo avalan con lo de llevamos 40 años  en el sector o nos hemos creado en el año X, (con los años, a poquitos debieron ir siendo  iluminados espiritualmente, por que lo que es conocimientos han adquirido muy pocos)  Véase un ejemplo:  alguno llega a decir en sus publicaciones  que si se pone chapa de cobre sobre madera esta ha de ser compatible con el cobre (roza la imbecilidad , solo hace falta darse cuenta que las madera se suelen tratar con sales de cobre) pero sí, lo hemos visto como consejo en algún sitio de esos de llevamos años en el sector, realmente patético. (Empresarios que incluso promocionan algunas de sus obras como que están hechas con sistemas de junta alzada cuando en realidad están con junta de listón. Con certeza podemos aseverar que no es de extrañar puesto   que ni han pisado las obras y aún así se atreven a dar lecciones de sabiduría).  Eso sí, parece que todo está resuelto con esas cámaras de ventilación que son mejores o peores dependiendo de donde le venga el aire al que las promociona, no al que las vende, es que lo de tantos años en el sector da para mucho. Y digo yo:  ¿cual es la diferencia entre las buenas láminas y las menos buenas? es de sospechar que la diferencia está  en el precio y la afinidad que se tenga con el distribuidor. Se supone que todas  han de reunir garantías de durabilidad sea de la marca y modelo que sea. Lo lamentable es que cuando aparece el infortunio nadie sabe nada y se vuelven locos buscando las más estúpidas justificaciones. Sería de agradecer que algún fabricante o instalador de esos que aconsejan a pies juntos  aclarase el porqué de las corrosiones  de las chapas de zinc y a que se deben, ¿cuales son los fenómenos químicos o físicos que las provocan?

Claro, que si se habla de otras fórmulas de soporte, se va al garete el negocio de las láminas fantásticas y las patillas especiales y homologadas como han llegado a decir. Lo curioso es que en mayoría y desde siempre, en países con solera en el empleo de estos materiales, se utilizan soportes compatibles. Se conocen cubiertas metálicas centenarias que han resistido el ariete demoledor del tiempo. Nos gustaría conocer alguna, centenaria o de medio siglo, que  esté instalada con láminas de ventilación  de esas llamadas “vapozinc” “lamina delta” Como se las suele vender como láminas de ventilación,  serviría de  mucho que se nos ilustrase con unas breves nociones de aerodinámica haciéndonos saber como  se mueve el aire en esas cavidades, a la vez y ya para completar diciéndonos con que fórmula mágica cuentan   esas láminas para no sufrir degradación en el tiempo. Vamos a ser claros,   las famosas láminas requieren de más fe que la creencia en  los mandiles virginales.  A los pocos años, al menos en las cubiertas que hemos levantado, el resultado está a la vista y la palabra es INSERVIBLES por pura degradación.

 Pocas veces hemos visto imágenes de cubiertas ruinosas, pero las hay y muchas. ¿ si trabajamos con tanta eficacia y tantos conocimientos, como suceden tantos percances? 

Manuel Álvarez

 

¿Necesaria o imprescindible? la cámara de aire entre la hoja de zinc y el soporte.

NO  IMPRESCINDIBLE, SI ACONSEJABLE

Cuando  en nuestro argot utilizamos el término “cámara de ventilación”, nos estamos refiriendo a una superficie entre la parte inferior de la hoja de zinc y el elemento siguiente sobre el que va apoyada la hoja. Entendemos una separación que se produce a la postre de instalar un elemento con múltiples resaltes  sobre el que se asienta la chapa de zinc quedando esta puntualmente separada menos de 1 cm. . Generalmente, estas láminas se instalan sobre soportes continuos, de tal manera que por un lado evitan el contacto masivo de la chapa con el soporte y por otro, engañosamente  “garantizan la ventilación”. hay otros sistemas  de conseguir la tal  “cámara de ventilación” a las que me referiré.

Cata realizada en cubierta sin lámina, chapa con humedad constante

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Primero de nada, deberíamos deslindar si se trata de una cámara de ventilación o de aire, concibiendo esta última como pequeños espacios que obviamente han de contener aire, aire más bien  húmedo y en reposo.    Por muy bien que suene  cámara de ventilación,  son eso, minúsculos espacios  de aire el que  va a entrar en movimiento forzado por presiones que se generen.

No hace falta acudir a un estudio aerodinámico para concluir de que la ventilación, entendida como tal en estos espacios es prácticamente nula, lo que lleva implícito de que la renovación del aire sea excesivamente lenta. Teniendo en cuenta esta exposición, fácil es entender que tal cámara no es necesaria. Pero, si llegamos a la conclusión de que no existe tal ventilación efectiva  ¿por qué se hace tanta insistencia y recomienda generar la tal cámara ?. Aduciendo a que se producen condensaciones en la superficie inferior de la hoja ( cara oculta ) y con la cámara se eliminan ya que de no eliminarse esas condensaciones puede surgir la corrosión en la chapa. Hasta aquí todo bien, pero ¿y  qué ocurre para que aún   cumpliendo el protocolo se llegue a corroer la chapa? Aquí surge la gran incógnita.  Si se realiza una instalación siguiendo las directrices de procurar la “ventilación” con láminas concebidas a tal efecto, ¿a qué se deben  el  origen de  las corrosiones?, es evidente que por falta de ventilación no tendrían que suceder. Otros motivos tiene que haber pero nadie se atreve a opinar públicamente. Queda meridianamente claro que la cámara de ventilación no es imprescindible como algunos aseveran. Veamos algunos ejemplos en las tres imágenes , la primera corresponde a una cata realizada en  cubierta de chapa de zinc instalada sin lámina y sometida a una humedad constante de entre el 80 – 82% durante más de 10 años, la segunda corresponde a   cubierta también de zinc instalada sobre lámina y la tercera igualmente instalada sobre lámina y tablero, En este ultimo caso, no solo la chapa estaba inservible, también  tablero totalmente descompuesto claros ejemplos de lo que venimos comentando.

 

las dos últimas imágenes corresponden a una misma cubierta de poco más de un año. Se instalo como soporte tablero aglomerado, lámina alveolar y posteriormente chapa de zinc. Observamos que la chapa esta emanando hidróxido a ritmo agigantado. El tablero de soporte está totalmente descompuesto. Dicho tablero es componente de un panel sándwich. La cubierta cobija un espacio público. En este caso hubiese sido conveniente procurar una cámara de aire, pues todo el vapor que deja pasar el tablero por sus múltiples uniones se podría evacuar, mientras que la lámina lo que hace es custodiarlo y así termina absorbiendo la humedad el tablero  al descomponerse, emana gases químicos volátiles orgánicos cuyos iones repercuten en el zinc. A la vez, como se comprueba, el tablero termina totalmente descompuesto.Una vez que el tablero pierde su resistencia, la hoja de zinc queda totalmente suelta derivando el que pueda salir desplazada por la fuerza del viento.
Si se hubiese instalado sobre el tablero un enrastrelado de madera y posteriormente un entablado de madera, a buen seguro no estaría sucediendo la catástrofe que se visualiza.
En la imagen siguiente representamos un entablado de madera sobre el tablero. Instalamos rastreles de madera de pino de 40×40 mm. aproximadamente  en el mismo sentido de las pendientes, separados unos 50 cm. Sobre ellos, perpendicularmente instalamos la tabla de pino de 170 x 22 mm. aproximadamente, dependiendo de la humedad que se presuma en esa cámara, debemos de utilizar el clavazón adecuado, a poder ser de acero inox. las tablas han de ir separadas no más de 20 mm.  De esta forma conseguimos entre la tabla y el tablero una generosa  cámara de aire , este en movimiento va a crear circuito incluso entre la chapa y la tabla, pues se lo va a permitir la separación de las tablas. Es aconsejable distribuir respiraderos (beatas) ordenados sobre la cubierta, ellos serán suficientes para succionar y expulsar aire que se pondrá en movimiento por la diferencia de presiones. Este sistema conlleva la tal ventaja de permitir instalar la hoja directamente sobre el entablado de madera que siempre recomendamos de pino, prescindiendo así de cualquier elemento separador. Fácil es entender que esta si es una cámara efectiva que nada tiene nada que ver con lo que se representa en las imágenes anteriores.
Nos venimos refiriendo a cubierta de zinc realizada sobre tablero tipo Sándwich. No podemos pasar por alto que algunas  cubiertas se realizan sobre mortero de cemento separando la hoja de zinc por una lámina alveolar, aunque la mayoría llevan rastreles de madera, sobre ellos tablero aglomerado sobre el que se superpone la lámina alveolar u otras y seguidamente la chapa de zinc. En este caso no podemos olvidar la humedad de obra que contiene el forjado y como se va a eliminar. Evidentemente la humedad se va a ir evaporando, tendiendo ese vapor generado a ocupar el espacio que hay entre la losa y el tablero que la irá absorbiendo. El vapor (gas húmedo) tenderá a condensarse tanto en la cámara, dentro del propio tablero o entre la lámina y el mismo. El resultado viene siendo la progresiva degradación del tablero, que en su descomposición mas o menos acelerada, igualmente va a despejar gases.  Importante este último dato, no olvidemos como se produce la corrosión electrolítica,  tablero y   zinc comunicados por un medio húmedo = a pila asegurada. El zinc esta comunicado con los tableros mediante las grapas de fijación que son pueden servir de elementos conductores, así el zinc cederá electrones quedando así con carga positiva y de ahí deriva la corrosión.
Las llamadas láminas de ventilación que además a la mayor parte o a casi todas se le atribuye cierta impermeabilidad nos traen de cabeza,  Están tan adornadas de marketing que muchos las terminan concibiendo como imprescindibles, es decir, que hay que poner lamina sí o sí. Hasta tal extremo se llega que nos hemos encontrado cubiertas con soporte de tabla separada y la lámina sobre la tabla. No tiene ni pies ni cabeza, ni sentido, pero se hace.

Partiendo siempre de que el zinc esta perfectamente concebido para su utilización en cubiertas pudiendo ser su vida útil muy larga, es necesario para que preste íntegramente el resultado esperado, que los adyacentes empleados sean compatibles y vayan acordes con su durabilidad. Lograríamos así una cubierta realmente efectiva. De poco sirve que el metal, como tal, esté fuera de toda duda si fallan o terminan destruyéndolo los elementos que utilizamos para su instalación.
La cámara de aire no es imprescindible si el soporte es compatible y así esta demostrado, si se procura esa cámara con un soporte incompatible, de poco sirve si el propio soporte  va a terminar trastornado al zinc.
Por el contrario, siempre no solo la hoja de zinc, incluso el soporte compatible se va a sentir favorecido si procuramos una cámara de aire efectiva.

Manuel Álvarez

 

 

 

 

 

 

EL ZINC POR DENTRO

PROCESO DE FABRICACIÓN DE LA HOJA DE ZINC

EN CUMALSA, dentro de nuestro afán por conocer los materiales que empleamos en  cubiertas. Por diversos motivos nos estamos adentrando, un poco más que en otros, en el zinc. Por ello aprovechamos  todas las oportunidades que se nos presentan a diario, cada vez con más frecuencia, para escudriñar a fondo en el comportamiento de un material tan utilizado como es el zinc. Son muchas las demandas de información que recibimos a cerca del comportamiento de la hoja de zinc, es mucho también el tránsito que se hace por nuestra Web en busca de todo aquello relacionado con el comportamiento de la chapa de zinc y nuestra opinión por el periodo de vida útil del material.  En todas nuestras opiniones al respecto ofrecemos la información más veraz que extraemos de nuestras investigaciones.

Nuestro empleo del zinc en cubiertas no es ocasional, ni reciente, data de muchos años y ello nos permite hablar con certeza de los resultados, si bien para asimilar algunos fenómenos visibles hay que contar con conocimientos amplios en el campo de la química o de la física. Puede parecer inverosímil pero, el zinc  tiene un comportamiento vivo respondiendo fielmente  ante los agentes  y fenómenos que  lo rodean.

Pocas veces hablamos del material como tal y menos del proceso de fabricación de la hoja de zinc, pero para reforzar nuestros estudios si estamos vigilantes  ante los métodos y procesos de fabricación que se emplean , ello nos lleva a visitar las industrias. Por parte de algunos fabricantes hemos encontrado muchas reservas a la hora de hablar de los procesos, tantas como que igual hasta se despachan con que son secretos de empresa . La información, en la mayoría de los casos, se limita a: aquí se funde, por allí sale, allí se lamina y más allá se recoge inmaculado. Después  una bolsita  con algún catálogo  de cosas bonitas y ya sale uno mas que  ilustrado, endiosado o idiotizado.

Contamos en España con una industria de Vanguardia que es ELZINC”   Asturiana de Laminados. En una primera ocasión que visitamos la fábrica, desde nuestra ignorancia en ese campo, hemos obtenido muchos datos relevantes que nos estimularon para seguir profundizando en nuestros estudios. los resultados nos van obligando a saber más sobre todos los procesos de fabricación, ello nos lleva a realizar nuevas visitas incluso a intercambiar información. Recientemente hemos realizado nueva visita a la Industria “EL ZINC” ya con más conocimientos por nuestra parte, hemos podido comprobar el dinamismo en la investigación y esfuerzo por sobre mejorar el producto terminado,   incluso la   puesta en marcha de novedosos productos hasta ahora, al menos en nuestro país, totalmente desconocidos que amplían la gama contribuyendo a ampliar el abanico del empleo del zinc en construcción.  Tuvimos la magnífica oportunidad de visitar desde el “sótano” hasta el “tejado”, debatir incluso sobre los procesos de fabricación y ver los exquisitos controles de calidad en sofisticados laboratorios. Al final de despedida, un abrazo de cortesía.

Con frecuencia hablamos de ciertos resultados negativos de la chapa de zinc, precisamente siempre atribuimos la negatividad a adyacentes, tales como los soportes. Conociendo a fondo la fabricación como a la que nos hemos referido, nos afianzamos aún mas recomendando su empleo.

Manuel Álvarez

EL PLOMO EN CUBIERTAS

EJECUCIÓN DE TRABAJOS .

Plancha de plomo destruida
Plancha de plomo destruida

Trabajar el plomo no es cosa fácil, hay quienes se atreven a hacerlo basándose en que al ser tan buen metal lo va soportar todo. La verdad es que sí soporta, eso si se instala adecuadamente, de lo contrario la ruina, más bien inmediata, está asegurada. Lamentablemente  las cubiertas o cubriciones  de plomo que requieren de mantenimiento o se encuentran en estado ruinoso son las realizadas en épocas más recientes, con no más de 20 años.  Sabemos de las cualidades de la plancha de plomo y no debería de requerir mantenimiento, la realidad es bien distinta, en la mayoría de los casos el   mantenimiento significa reparación o sustitución de planchas enteras o incluso la totalidad de la cubierta. El problema añadido es que cuando la cubierta no funciona el soporte también se ve afectado. En la mayoría de los casos se valora el estado de la cubierta a la vista de las humedades interiores o exteriores. Todo ello por una planificación despistada asistida de instalación inadecuada.

Nos ha tocado, en alguna ocasión, desmontar cubriciones de plomo muy antiguas, por documentación nos consta alguna de  1718.  En ella, como en muchas otras,   pudimos estudiar minuciosamente un sinfín de singularísimos detalles. Siendo el destino de la plancha más bien para obras muy singulares en las que no se podían improvisar,  seguramente como en muchos otros casos, los instaladores procedían de Flandes, ellos gozaban de oficio destacado y de aquellos artesanos habrían  podido a penas  aprender algunos de sus asistentes nativos que ellos y sus pupilos se han  ido perdiendo con  el tiempo.

Ya en aquellos entonces, los maestros de obras,  eran muy conscientes de la importancia de las cubiertas, si tiramos de historia, veremos con que materiales se cubrían edificios majestuosos por cualquier parte del mundo, nos vamos a ir encontrando con el plomo, el cobre y la pizarra con diferencia de otros.

Los operarios que trabajen el plomo (plomeros) han de gozar de una nutrida experiencia, práctica y pericia además de conocer algunas de las características del metal. La plancha de plomo requiere de un exquisito cuidado en su instalación, importantísimo es el soporte y la atención a las fijaciones que deben ser de materiales compatibles con el plomo, póngase por ejemplo el cobre. Igualmente hay que tener muy en cuenta los futuros movimientos que va a tener el metal, en esos movimientos no puede haber obstáculos que los frenen, la consecuencia sería la deformación y posterior rotura. Muy importante que la superficie sobre la que se va a poner la plancha de plomo este perfectamente lisa y con garantías de que no se verá degradada por ningún elemento. Siempre que hemos desmontado cubriciones antiguas, nos hemos encontrado con el soporte de madera maciza, incluso yeso. En el caso de la madera, suele estar ligeramente separada y las tablas de poca anchura, con ello se garantiza una pequeña ventilación que evitará minúsculas condensaciones que podría afectar a la madera. En soportes de yeso, siempre hemos visto un elemento separador, generalmente papel común de prensa o de estraza.

El plomo se ha utilizado mucho y aún se utiliza para la coronación de muros, sobre todo en edificios singulares. En estos casos no es muy recomendable acudir a la madera para regularizar las superficies, pues puede llegar a degradarse por la propia humedad de los muros, el yeso tampoco sería efectivo, lo más indicado es acudir a morteros, más bien ricos, posteriormente un fieltro intermedio o simplemente papel de estraza. Nunca se debería poner directamente sobre piedras bastas, pues terminarán  punzonándolo.  En los últimos tiempos, la mayor parte de los trabajos que se acometen con plancha de plomo son de restauración. Siempre nos encontramos el mismo dilema común que es el de los encuentros contra paramentos verticales. Es aquí donde intervienen los elementos sintéticos que van a durar desde luego menos que el plomo. Estos encuentros pueden parecer delicados de resolver, pero en realidad son más sencillos de lo que algunos lo pintan si tenemos en cuenta que el plomo es un excelente sellador. Se pueden preparar amalgamas a base de aceites vegetales y productos químicos que son tremendamente efectivos y ya utilizados en las primeras aplicaciones de plomo. En este tipo de remates, la chapa que ha de ir pegada contra la pared ha de ser independiente de la principal, esta última en ningún caso ira clavada directamente.

Las uniones entre chapas en encuentros o quiebros se pueden resolver plegando el plomo con sumo cuidado si se  batea  ya que puede disminuir su densidad, Estas operaciones de plegados se han de hacer bajo temperatura adecuada, incluso se puede calentar ligeramente la plancha para que resulte más maleable. Si los pliegues ofrecen dudas se debe de acudir a la amalgama antes mencionada que se intermediará entre las chapa. La amalgama tienen la propiedad de ser elástica y perfectamente impermeable. El último recurso es el  estañado, quien lleve a cabo esta labor debe de tener practica suficiente y trabajar con aleaciones de estaño plomo adecuadas. Pocas veces se tiene en cuenta que el plomo en el aire húmedo pronto pierde su brillo y se recubre de una capa de suboxido, este proceso permite que se manifiesten chorretones desagradables por donde discurre el agua que previamente paso por la plancha de plomo, esto se puede evitar con la aplicación de una mano de producto vegetal.

Para el resumen de este trabajo, hemos estudiado  directamente en diversas obras tales como: Cuartel General del Aire ( Madrid), Monasterio del Escorial, Catedral de León, Catedral de Astorga, Casa de Botines (León) Catedral de Valladolid, Catedral de Palencia, Monasterio del Paular (Rascafría), Jardines y edificios en la Granja de S. Ildefonso, Iglesia de S. Sebastián ( Salamanca) Iglesia de S. Ildefonso ( Toledo) Palacio de Carlos V (granada)   Catedral de Ávila, y Diputación Foral de Navarra.

algunas imágenes

Manuel Álvarez

UNA MIRADA AL FUNCIONAMIENTO DE LA CUBIERTA DE ZINC

 

CORROSIONES EN LA HOJA DE ZINC

En la práctica totalidad de las inspecciones que hacemos en cumalsa, S.L:  Nos encontramos con las mismas patologías que nos son otras que las corrosiones . En la mayoría de los casos la conclusión termina siendo la de retirar toda o la mayor parte de la cubrición.  No entendemos que como siendo el zinc un material tan masivamente empleado en nuestras construcciones, como a la vista de tan graves resultados  nadie se pronuncia. Se  habla muy poco, casi nada o  nada de estos fenómenos de la corrosión y lo que es peor, no sabemos el porqué se siguen prescribiendo y realizando cubiertas  con los mismos sistemas que conocemos como dudosos, es más, sin haber determinado la causa que origino la ruina, se han llegado a hacer  y se hacen reparaciones muy importantes repitiendo exactamente el mismo sistema primitivo.

Desde Cumalsa, S.l. venimos informando de estos fenómenos y como siendo el metal zinc u otros metales plenamente aptos para su utilización en cubiertas., como así se puede constatar su optimo resultado a la vista de muchas cubriciones  que datan de antaño en los diversos puntos de nuestra geografía, también repartidos por todo el mundo. Como es posible que estemos asistiendo a la vista de infinidad de cubiertas ruinosas, con muy pocos años de vida y  ni fabricantes ni presumidos entendidos del sector no se pronuncien claramente y con razonamientos científicos  de porque se producen estos fenómenos. Sería muy conveniente, alentador  y tranquilizador una información creible  para los futuros consumidores.  En Cumalsa, S.l. por nuestra trayectoria, a la vista de estos fenómenos, nos estamos preocupando desde hace varios años por investigar las patologías que se presentan en las cubriciones y podemos aseverar que la mayoría  se podrían haber evitado. No dejamos  de decir que los metales ejemplo el zinc, que es del que más venimos hablando, con las últimas técnicas de fundición y laminación que conocemos directamente como las de  “ELZINC” dejan pocas dudas para su uso,  

A medida que va pasando el tiempo, nos vamos encontrando cada vez más con diversas patologías en la hoja de zinc. En los últimos años ha habido informes crecientes de fallas rápidas de la hoja de zinc debido a la corrosión desde dentro hacia fuera, en algunos casos median menos de 5 años.

Aunque este fenómeno de la corrosión lo vemos mayormente en el zinc, otros materiales como el cobre y el plomo no son ajenos y también se corroen. ( en alguna de nuestras publicaciones, representamos techos de plomo totalmente ruinosos ).

Estos resultados que están dando las cubiertas, no solo en nuestros país, están alertando significativamente a algunas asociaciones, no en vano  la NFRC de representantes de fabricantes, contratistas y expertos en techos se hace eco de los alarmantes resultados  y se manifiesta considerando :  ” que los techadores y la industria y los diseñadores en general necesitan orientación sobre el procedimiento correcto que se debe adoptar en la instalación de techos”   Precisamente para evitar estos fenómenos y así conseguir lo que se espera de la cubierta de zinc, una larga vida útil.

CORROSIONES POR TENSIÓN 

rotura por tensión
rotura por tensión

No nos podemos centrar exclusivamente en las corrosiones de interior a exterior, que científicamente sabemos porque se producen. Puede acusar la hoja de zinc  otro tipo de corrosiones   que no tienen absolutamente nada que ver con las mencionadas. ejemplo  la   “CORROSIÓN POR TENSIÓN ”  Este otro fenómeno muy extendido no es  para nada menos importante que el anterior. Desde nuestra visión, en el 100% de  cubiertas que analizamos, si no es el problema principal, nos  encontramos siempre alguna corrosión por tensión.

Se entiende la corrosión por tensión como una falla estructural relacionada a la corrosión. En este caso el metal de carga presenta grietas y fracturas bajo el límite especifico de carga.

Al tener contacto con iones corrosivos, las grietas microscópicas en el metal causadas por la tensión y el estrés de una carga pesada se propaga a medida que los iones corrosivos alcanzan el final de dicha grieta. Esto causa que la grieta crezca gradualmente y sea una causa potencial de un daño estructural eventual. La corrosión por tensión es muy peligrosa porque puede ocurrir frente a sustancias que por lo general no tienen un alto nivel de corrosión sobre el metal. Ello hace que esta corrosión tan peligrosa se produzca mientras que el resto de la superficie del metal parece no estar afectada.

la prevención de este tipo de corrosión es un tema por lo general de diseño, por otra parte, el metal debería  pasar pruebas de tensión.

La corrosión por tensión se incrementa a altas temperaturas y frente a líquidos que contienen cloruros disueltos.

VER IMÁGENES :  Todas las imágenes que se pueden visualizar en este enlace corresponden a la misma cubierta de unos 600 m/2 . Han sido realizadas en uno de nuestros últimos trabajos de investigación. 

Nota: todos los artículos y publicaciones que se hacen en la Página Web de Cumalsa, S.l. proceden de sus propias investigaciones tanto de campo como de informaciones recopiladas de diferentes textos asociados con la materia. Por lo que están amparadas por derechos de autor.  Se prohíbe  el copiado o la difusión por otro cualquier medio sin permiso expreso del autor.

cumalsa, s.l.

CORROSIONES BAJO TENSIÓN ( IMÁGENES)

Todas la imágenes que a continuación se detallan corresponden a la misma cubierta cuya patología generalizada en la hoja de zinc es la corrosión por tensión. Han sido extraídas de uno de nuestros últimos informes.

Este fenómeno de la corrosión bajo tensión no es nuevo, esta perfectamente identificado y se da con demasiada frecuencia en los techos de hoja de zinc, así lo vienen reconociendo diversas asociaciones de techadores repartidas por Europa, que aseveran que esta patología viene más dada en mayoría por la falta de saber e incuria a la hora de instalar la hoja de zinc. En este sentido se pronuncia también la asociación “NFRC” de techadores de Reino Unido, una de las más prestigiosas.

En la mayoría de los techos que tenemos la oportunidad de estudiar observamos que la corrosión bajo tensión se repite, el porqué esta perfectamente identificado. Esta patología se suma a otros tipos de corrosión en la hoja de zinc Como los que derivan de soportes incompatibles.

 

 

vista de la falla en la chapa
Nueva falla
Nueva falla, se intento reducir con estaño.
Falla reparada con estaño
Varias fallas
Falla ( corrosión bajo tensión)
Falla reparada con estaño
Diversas fallas reparadas con estaño
Rotura por tensión
Rotura por tensión Reparada con estaño
Déficit en el remate de engatillado
Rotura por tensión
Déficit en remate de engatillado
Rotura por tensión en el estañado
Diversas fallas ( roturas por tensión )
Roturas por tensión ( previamente reparadas con estaño )
Diversas fallas ( corrosión bajo tensión)
Fallas reparadas con estaño
Corrosión bajo tensión
Corrosión bajo tensión
Corrosión bajo tensión ( previamente reparada con estaño )
Corrosión bajo tensión ( Reparada con estaño )
Corrosión bajo tensión
corrosión bajo tensión
Corrosión bajo tensión
Corrosiones bajo tensión ( reparadas con estaño )
Corrosiones bajo tensión
Importante falla coincidiendo con el eje central de la chapa ( corrosión por tensión en diferentes direcciones )
Rotura de estañado por tensión
Rotura por tensión
Vista de un tramo de cubierta en el que se está produciendo el fenómeno de corrosiones bajo ensión.
Corrosión por tensión
Estañado reventado por tensión
Rotura por tensión
Vista de faldón de cubierta en el que principalmente se esta produciendo el fenómeno de corrosión bajo tensión
falla de corrosión por tensión reparada con estaño ( obsérvese como se sigue reproduciendo )
Clara falla de rotura por tensión ( demuestra clara falta de isotropía de la hoja de zinc, tengamos en cuenta que las roturas se producen en sentido perpendicular a las tensiones )
rotura por tensión en una grapa de fijación.( se trata de una grapa de las llamadas ” fijas ” )
Vista de un plano de cubierta
Desmontaje de cubierta para reponer la hoja de zinc. ( este tiempo se emplea para analizar el interior de la chapa y causas que repercuten en las corrosiones observadas. De esta forma llegamos a una conclusión clara de porque se ha producido el fenómeno.
Observense las grapas de fijación ( todas ellas “fijas ” obligan a la hoja de zinc a esfuerzos puntuales lo que termina derivando en las corrosiones vistas
Levantado de la hoja para su reposición
Levante de la chapa de zinc
Levante de la hoja de zinc
Vista del soporte (tabla de pino separada )
Véase la humedad de la tabla, ella se ha filtrado por una falla. esta derivando en la corrosión de los tornillos de fijación de la grapa.
Se puede ver claramente la falla reparada con estaño, Ella es la que permite la filtración al soporte. Precisamente la falla se sitúa justo al lado de la grapa fija. Sin duda la tensión se produce en este punto obligada por la grapa.
En esta imagen vemos claramente las grapas de fijación rotas a consecuencia de las tensiones. llama la atención el deposito lineal de hidróxido coincidiendo con la unión de las chapas. Ello significa la entrada de aire húmedo por estos puntos.
Nueva vista de la chapa por su cara interior
Vista de la grapa rota por tensión
Nueva vista de la grapa rota por tensión
Clara vista de rotura por tensión en la propia fijación de la grapa ( no descuidemos en esta imagen la dirección de la rotura para deducir el sentido de las tensiones.
Vista por la cara interior de la hoja de zinc. observese la clara rotura por tensión