
INSPECCIÓN DE CUBIERTAS
Verificación de estado de cubiertas.
En cumalsa, s.l. contamos con un departamento cualificado que se encarga de informar técnicamente del estado de cualquier cubierta de chapa de zinc, cobre, plomo o pizarra. Informamos basándonos en nuestros propios conocimientos investigaciones y estudios científicos, contrastados con diversa documentación asociada.
Nuestros estudios respecto al comportamiento de los metales zinc, cobre y plomo, se están teniendo en cuenta en algunas universidades y se utilizan en sus facultades de ingeniería mecánica.
A la vista de muchos resultados adversos que se están observando sobre todo en las cubiertas de chapa de zinc, serían muy indicadas las inspecciones visuales prematuras, es decir, dentro de los primeros años de vida y antes de que expiren los periodos de garantía. En caso de observarse cualquier anomalía o humedades, la inspección debería ser obligada y exhaustiva. No olvidemos que algunos procesos de deterioro en el zinc empiezan siendo muy lentos, casi inapreciables para terminar siendo irreparables, pudiendo terminar haciendo inservible la cubierta. Generalmente cuando la chapa de zinc presenta alguna disfuncionalidad, viene dada a consecuencia de carencias, vicios en la instalación o inadecuación de materiales empleados como complementos . En caso de observarse anomalías, han de conocerse debidamente las causas para reparar el daño de forma efectiva si puede ser posible.
Se deben deslindar lo que son defectos puntuales de la instalación de lo que ningún profesional está exento, de las reacciones impropias del metal. lo primero tiene solución, lo segundo es más complejo
Ante cualquier distorsión, en la mayoría de los casos, se hacen intervenciones a modo de reparaciones sin darle demasiada importancia, sin embargo, la cubierta sigue demandando intervenciones y así las reparaciones se suceden cada vez con más intensidad, hasta darse de cuenta que ya no hay remedio y ahí es donde empieza la debacle.
No necesariamente un instalador tiene que ser experto, pero si ha de tener habilidad y destreza suficientes para realizar aquello que de su oficio se le encargue. Por el contrario, el buen experto si que necesariamente debería ser instalador o gozar de sus conocimientos, por su saber, por su ciencia, sabe adelantarse a la mayoría de las patologías y si de ellas cabe o no su anulación.
LA CUBIERTA
La cubierta es esencial en cualquier edificación; hay una extensa oferta de materiales que están a disposición en el mercado, pero no todos ellos vienen acompañados de un código que regule su empleo. La mayor parte de las veces nos guiamos por”profesionales” o divulgadores categóricos que juegan a asesores e informan a su antojo, a provecho de su bolsillo . No son pocas las incógnitas que se plantean a la hora de planificar una cubierta y mucho mayores cuando se trata de acometer una reparación.
NUESTROS ESTUDIOS
En Cumalsa, s.l. informamos y asesoramos de forma veraz, basándonos en los datos que vamos consiguiendo en multitud de estudios científicos que día tras día realizamos y contrastamos, además contamos con nuestro propio laboratorio de ensayos metalográficos , lo que nos permite estar al día en el comportamiento y evolución de los metales instalados en cubiertas.
El empleo de un material desconociendo las propiedades y comportamiento del mismo en el tiempo pueden desembocar en ulterior ruina, que se podría evitar conociéndolo a fondo y haciéndolo acompañar de adyacentes adecuados.
COMPORTAMIENTO DE LOS MATERIALES EN EL TIEMPO
Del comportamiento en el tiempo de algunos materiales de cobertura deberían informar los fabricantes o distribuidores, pero utilizan demasiado poco tiempo en informar más allá de las virtudes. Si a la postre resulta ruina, no tienen escrúpulos en tildar de incompetente o incurioso al instalador que en parte sigue unas directrices marcadas por quienes venden los materiales, demostrado está que poco les debe importar el resultado. Lo que importa es vender.
Trabajamos con materiales que van a estar de perpetuo expuestos al ariete demoledor de la atmósfera , por eso el mejor laboratorio de ensayos es el paso del tiempo y también quien termina definiendo su comportamiento. Para tener un conocimiento aún no pleno y así poder informar con relativa seguridad,tienen que ir pasando muchos años manteniendo la constancia en las investigaciones, hay que observar periódicamente muchos trabajos para tímidamente ir viendo su evolución positiva o negativa.
En CUMALSA, S.L. solo podemos presumir de 14 años como empresa, pero arrastramos más de 40 años en este fascinante mundo de las cubiertas. Tras muchos tipos de estudios que nos van aportando pequeñas evidencias, algunas con mas contundencia que otras. Después de poder ver y realizar cubiertas en toda la geografía y en las más diferentes situaciones, ello nos va permitiendo extraer esos datos tan necesarios para asesorar de forma veraz, con absoluto rigor y amplio conocimiento. Las cubiertas, más las metálicas, tienen un comportamiento dinámico, suele ocurrir que lo que un día damos por sentado nos sorprende poco después con un comportamiento totalmente distinto.
Resulta sorprendente ver como se recomiendan o se hacen ciertas algunas informaciones sin el más mínimo razonamiento científico, las que pretenden que creamos como ciertas por el simple adorno de “llevamos “x” años en el sector” con imágenes de obras creídas como relevantes u otros artilugios de marketing. Los años por si solos nos envejecen no nos hacen sabios, pero son imprescindibles para el saber , pues sin el paso de ellos no se podría saber con certeza la durabilidad de muchos materiales, no se puede decir que un material va a durar 30 años si no se cuenta con precedentes similares. Pero, ¿ y qué pasa cuando lo que se presume que tenía que durar 30 no llega a los 12 a los 10, o los 6 y se sigue informando en la misma línea que cuando se recomendó ? Pese a lo que pese, no podemos dejar de decir que recibimos muchas solicitudes demandando información sobre cubiertas que están en estado ruinoso llevando muy pocos años realizadas. Añadimos, en el 99% de los casos las cubiertas que visitamos están en estado agonizante que ya viene de largo, pues rara vez no nos encontramos reparaciones anteriores, reparaciones que sin duda, las que nosotros vemos, contribuyen más a grabar el problema que a resolverlo.
¿ No es vergonzoso ver como cubiertas realizadas con materiales caros, que se venden como de la máxima calidad y se realizan con los consejos algunos meros alquimistas, al poco tiempo de estar instaladas hay que repararlas, desmontarlas o desesperadamente aguantar? Lo más grave es que pocos o muy pocos nos atrevemos a razonar científicamente las causas, y aún más grave aun atreverse a reparar sin el más mínimo escrúpulo, aplicando masillas, láminas asfálticas, pinturas Etc, Etc. A mínimo que pensemos, ¿ como se puede reparar definitivamente un material cuando para la reparación se utilizan elementos que se sabe a ciencia cierta que duran menos que el que se está reparando, claro, de ahí viene que las reparaciones se vayan sucediendo año tras años hasta que ya no hay remedio.
Como venimos diciendo, no es una cubierta, no, son muchas y repartidas por toda nuestra geografía, las que están dando problemas, ¿ Pero si se han realizado con las máximas garantías, siguiendo las recomendaciones de expertos , siguiendo nítidas prescripciones técnicas, cual es la causa que obliga a la ruina ?
Un par de apuntes gráficos. Observemos la siguiente imagen , se trata de una cubierta de zinc, una chimenea que despide gases de combustión de gasóleo, lleva 19 años instalada y ningún problema. ¿como se explica que eso de la agresión de los agentes externos? puedo asegurar que es inaguantable mantenerse cerca de la chimenea cuando está en funcionamiento, pues el sulfuro que desprende intoxica
El siguiente ejemplo: Se nos permitió hacer una cata en una cubierta que habíamos realizado muchos años atrás, está la chapa de zinc instalada sobre entablado de madera de pino, la humedad a la que esta sometida la madera oscila entre el 60 y el 68%, hasta el punto de haberse corroído totalmente muchos de los clavos que fijaban las tablas, la chapa de zinc esta en perfectas condiciones. Viendo esto ¿ como se explica la teoría de la necesidad “imprescindible” como mantienen algunos, de que en una cubierta de zinc es indispensable que la chapa este ventilada por su parte interior? sí , se recomiendan láminas magistrales, de esas mismas que algunas para hacerlas más llamativas las identifican nombrándolas con la cuarta letra del alfabeto griego. “DELTA” ¿Como se puede aseverar que la tal lámina garantiza la ventilación interior de la chapa, aún estando ayunos de conocimientos sobre aerodinámica se puede concluir de que tal aserto es categóricamente falso.

Nunca nos hemos querido poner en duda la calidad de los materiales empleados en cubiertas, ni tan siquiera la falta de empeño por parte de los instaladores, pero si la cubierta no funciona, ¿ qué es lo que ocurre? podemos decir que hay un déficit manifiesto de información y un importante ayuno de oficio a la hora de trabajarlos , eso puede obedecer a intereses que a la larga terminan volviéndose en contra para todos, sobre todo para el que tiene que padecer las consecuencias directas y correr con los gastos de las reparaciones llenas de incógnitas.
No tengo ningún reparo en reconocer que en tiempos iniciales he dado algunas informaciones rozando lo erróneo , la ignorancia inicial me permitió comulgar con datos genéricos que, como a todos, me fueron proporcionando los intrépidos vendedores, que por la novedad y a golpe de catálogo conquistaban hasta a los más prestigiosos prescriptores. El objetivo: que se prescribiese la marca y a poder ser también los adyacentes que las mismas firmas, intermediarias, se encargan de comercializar. Bien es
cierto, que cuando se hacen reclamaciones ante la sorpresa del comportamiento de algunos materiales, los suministradores culpan de incuria al instalador. Sí, el sufrido instalador, que si compra mucho se le venera y promociona y si no compra es incompetente. Es de Ley, si el material tiene comportamiento adverso, tiene que recoger la culpa quien lo vende, asesora sobre él y dicta adyacentes determinados, sin descartar al ignorante que haciéndose el experto comulga con lo que el hábil vendedor le recomienda .
Nuestro día a día, nuestra preocupación, nuestros conocimientos, también nuestra inquietud, nos ha despertado y hecho escudriñar y así podemos permitirnos el aproximarnos a la realidad y sencillamente comprender que la mayoría de las informaciones al uso, muchas de ellas , ni son veraces , ni están contrastadas para promocionarlas como las mejores, mas bien están orientadas a vender que a informar.
Es sorprendente ver como se reparten catálogos, casi libros de muchas hojas, llenos de detalles de instalaciones que muchas veces, sencillamente son imposibles de llevar a la práctica. En ellos no se habla absolutamente nada del comportamiento adverso que puede tener el zinc, por lo contrario solo se habla de las virtudes que claro que las tiene. Claro, que si se mencionase algunas incompatibilidades el negocio no sería el mismo.
Hartos estamos de ver páginas Web y catálogos con las más atractivas imágenes, de vídeos de cubiertas los que se hacen apetecer hasta por sus músicas casi celestiales. Pero a la hora de querer informarse de cual es el comportamiento físico químico o mecánico del material en el tiempo, nada de nada, hay que conformarse con las generales de la “ley”, densidad, color, algunos coeficientes, llevamos años en el sector y poco más.
Como ejemplo: Se ha llegado a recomendar, por algunos fabricantes, canalones de cobre, o de zinc, unidos con elementos sintéticos garantizando su estabilidad en muchos años pasando por alto la soldadura de estaño. ¿ a alguien le puede caber en la cabeza que una masilla pueda acompañar en durabilidad a una chapa de cobre por ejemplo.
Mucho se lleva hablado de que en la cubierta de zinc es imprescindible la ventilación, adornando con tímidas explicaciones a modo de papel de caramelo. Cada cual que piense lo que quiera, pero los resultados saltan a la vista. Resulta sorprendente, cuando se va a vender todo son maravillas, en el momento que aparece algo extraño, que después de lo que se esta viendo es más común que extraño, nadie se pone de acuerdo el porqué de tales resultandos.
Instaladores que siguen manteniendo a pies juntos que algunos metales, como el zinc, necesitan de una cámara de ventilación interior, pero no se matiza el porqué y esto incluso lo dicen algunos empresarios de la instalación, que lo avalan con lo de llevamos 40 años en el sector o nos hemos creado en el año X, (con los años, a poquitos debieron ir siendo iluminados espiritualmente, por que lo que es conocimientos han adquirido muy pocos) Véase un ejemplo: alguno llega a decir en sus publicaciones que si se pone chapa de cobre sobre madera esta ha de ser compatible con el cobre (roza la imbecilidad , solo hace falta darse cuenta que las madera se suelen tratar con sales de cobre) pero sí, lo hemos visto como consejo en algún sitio de esos de llevamos años en el sector, realmente patético. (Empresarios que incluso promocionan algunas de sus obras como que están hechas con sistemas de junta alzada cuando en realidad están con junta de listón. Con certeza podemos aseverar que no es de extrañar puesto que ni han pisado las obras y aún así se atreven a dar lecciones de sabiduría). Eso sí, parece que todo está resuelto con esas cámaras de ventilación que son mejores o peores dependiendo de donde le venga el aire al que las promociona, no al que las vende, es que lo de tantos años en el sector da para mucho. Y digo yo: ¿cual es la diferencia entre las buenas láminas y las menos buenas? es de sospechar que la diferencia está en el precio y la afinidad que se tenga con el distribuidor. Se supone que todas han de reunir garantías de durabilidad sea de la marca y modelo que sea. Lo lamentable es que cuando aparece el infortunio nadie sabe nada y se vuelven locos buscando las más estúpidas justificaciones. Sería de agradecer que algún fabricante o instalador de esos que aconsejan a pies juntos aclarase el porqué de las corrosiones de las chapas de zinc y a que se deben, ¿cuales son los fenómenos químicos o físicos que las provocan?
Claro, que si se habla de otras fórmulas de soporte, se va al garete el negocio de las láminas fantásticas y las patillas especiales y homologadas como han llegado a decir. Lo curioso es que en mayoría y desde siempre, en países con solera en el empleo de estos materiales, se utilizan soportes compatibles. Se conocen cubiertas metálicas centenarias que han resistido el ariete demoledor del tiempo. Nos gustaría conocer alguna, centenaria o de medio siglo, que esté instalada con láminas de ventilación de esas llamadas “vapozinc” “lamina delta” Como se las suele vender como láminas de ventilación, serviría de mucho que se nos ilustrase con unas breves nociones de aerodinámica haciéndonos saber como se mueve el aire en esas cavidades, a la vez y ya para completar diciéndonos con que fórmula mágica cuentan esas láminas para no sufrir degradación en el tiempo. Vamos a ser claros, las famosas láminas requieren de más fe que la creencia en los mandiles virginales. A los pocos años, al menos en las cubiertas que hemos levantado, el resultado está a la vista y la palabra es INSERVIBLES por pura degradación.
Pocas veces hemos visto imágenes de cubiertas ruinosas, pero las hay y muchas. ¿ si trabajamos con tanta eficacia y tantos conocimientos, como suceden tantos percances?
Manuel Álvarez